WALLER OFRECE UNA IDEA DE SENTIDO COMÚN ACERCA DE LOS RIESGOS FINANCIEROS DEL CAMBIO CLIMÁTICO

Por Bryan Cutsinger
American Institute for Economic Research
29 de mayo del 2023

Nota del traductor: la fuente original en inglés de este artículo es bryan cutsinger, american institute for economic research, climate, May 29, 2023. En él podrá leer enlaces relevantes originalmente en letra azul en el texto.

En una conferencia reciente en España, el gobernador de la Junta de la Reserva Federal [FED] Christopher Waller dijo que los riesgos asociados con el cambio climático no representan una amenaza exclusiva a la estabilidad del sistema financiero de Estados Unidos. Como tal, él no ve la necesidad de que la FED adopte regulaciones particulares para mitigar riesgos relacionados con el clima, en especial cuando al hacerlo puede desviar la atención de la FED lejos de otros riesgos más relevantes.

La inestabilidad financiera ocurre cuando a los prestamistas no se les devuelve el dinero o temen que no lo sea. Cuando esto sucede, los préstamos se caen y la tasa de interés se eleva, reduciendo la disponibilidad de crédito y dañando a la economía más amplia. Si los prestamistas carecen de los recursos necesarios para absorber las pérdidas en que incurren cuando quienes piden prestado incumplen pagar sus préstamos, puede que no sean capaces de devolver el dinero a sus depositantes. Si no se controla, esta dinámica rápidamente conduce a una crisis financiera.

El gobernador Waller señaló que un riesgo de estabilidad financiera debe poseer dos características. Primera, debe tener efectos de corto plazo, que posiblemente resulten en préstamos en que el dinero no es devuelto. Si los efectos del riesgo son a muy largo plazo, los prestamistas se pueden cubrir contra ese riesgo poniéndole un precio a él en sus contratos futuros con quienes piden prestado – en cuyo caso, el riesgo no significaría una amenaza para la estabilidad financiera. Segunda, un riesgo de estabilidad financiera debe ser lo suficientemente serio como para que pueda resultar en pérdidas lo suficientemente grandes para amenazar la economía como un todo, no solo un puñado de instituciones financieras. Estas dos características le permiten a la FED distinguir entre impactos económicos impredecibles y vulnerabilidades del sistema financiero (por ejemplo, activos sobrevaluados, riesgo de liquidez, y el monto de deuda mantenida por familias y empresas) que pueden tratarse por la vía de una política.

El gobernador Waller afirma que la FED puede promover un sistema financiero resiliente y robusto ante diversos impactos financieros al enfocarse en tales vulnerabilidades. En su idea, este enfoque es superior a prepararse para impactos específicos que puede que sucedan o no, pues no requieren que responsables de políticas posean el conocimiento necesario que identifique las probabilidades de cada uno y todos los impactos potenciales sobre el sistema financiero.

¿Qué tiene que ver todo esto con el cambio climático y sus riesgos para la estabilidad financiera? El gobernador Waller explicó que podemos dividir en dos grupos los riesgos relacionados con el clima. El primero son riesgos físicos, como acontecimientos del clima más frecuentes o severos como huracanes. Estos riesgos pueden afectar la estabilidad financiera al reducir los valores de las propiedades. Las instituciones financieras que prestan con base en este tipo de activos podrían llegar a ser menos solventes, resultando en una reducción de sus préstamos y, así, disminuyendo el crecimiento económico. Otra posibilidad es que los valores de las propiedades podrían caer simultáneamente, si las empresas aseguradoras que aseguran estas propiedades se alejan de una región en particular debido a los riesgos físicos del cambio climático.

En la visión del gobernador Waller, ninguna de estas posibilidades amenaza al sistema financiero en exclusiva. Él señala investigación que sugiere que las pérdidas a propiedades causadas por acontecimientos de un clima extremo no afectan la estabilidad del sistema financiero de forma significativa. También, cita investigación que sugiere que los prestamistas ya toman en cuenta en el precio los riesgos físicos del cambio climático. Finalmente, hace ver que las instituciones financieras tienen más que suficiente capital para absorber las pérdidas que podrían causar estos riesgos físicos.

El segundo tipo de riesgo asociado con el cambio climático que el gobernador Waller señala es el riesgo asociado de moverse hacia una economía que produzca menos emisiones de efecto invernadero. Dado que esta transición tal vez será relativamente predecible y gradual, los prestamistas y quienes piden prestado no deberían tener problema en tomar en cuenta en los precios estos costos de transacción en sus acuerdos. Pero, aún si la transición es caótica -por ejemplo, debido a incertidumbre acerca de la política o innovación tecnológica- no debería significar una amenaza singular para la estabilidad financiera.

Como lo hace ver el gobernador Waller, la formulación de política a menudo involucra mucha incertidumbre, pero, históricamente, esta incertidumbre no ha sido fuente de fragilidad financiera. De la misma forma, una innovación relacionada con el clima no es diferente de otras formas de innovación en el tanto ambas son “perturbadoras.” Por ello, la innovación relacionada con el clima no parece significar un riesgo excepcional para el sistema financiero. Y los prestamistas tienen una larga historia de adaptación a la innovación tecnológica.

La visión de sentido común del gobernador Waller acerca de los riesgos financieros del cambio climático es notable y encomiable. Sus señalamientos expresan una disposición de los funcionarios de la FED de echar para atrás llamados de políticos y comentaristas para que la FED se involucre más en debates ideológicamente cargados, que amenazan con subvertir la independencia del banco central, en especial en una época cuando la FED está tratando de reducir una inflación históricamente alta. Enfocarse en riesgos específicos, como aquellos relacionados con el cambio climático, necesariamente involucra juicios de valor. Tales juicios de valor deberían dejarse a políticos, no a reguladores no electos en la FED.

Bryan Cutsinger es profesor asistente de economía en la Escuela Norris-Vincent de Negocios en la Universidad Estatal de San Angelo, Texas, en donde también sirve como director asistente del Instituto de Mercado Libre en la Universidad Texas Tech. El foco de investigación del Dr. Cutsinger es historia monetaria y economía política. Su trabajo académico se ha publicado en importantes revistas económicas, incluyendo Economics Letters, el European Review of Economic History, Explorations in Economic History, Public Choice, y el Southern Economic Journal. Sus escritos populares han aparecido en el National Review, el Wall Street Journal y el Washington Examiner. El Dr. Cutsinger recibió su licenciatura en economía en la Universidad de Colorado en Boulder, y su maestría y doctorado en la Universidad George Mason, en donde se le otorgó el Premio William P. Snavely por Logro Destacado en Estudios de Posgrado en Economía.

Traducido por Jorge Corrales Quesada.