LA GUÍA FINAL HACIA LAS TRIBUS DE LA IZQUIERDA EXTREMA-PARTE 1

Por Kristian Niemietz
1828 Org
13 de febrero del 2023

Tankies [término peyorativo usado por Marxistas-Leninistas disidentes para designar a miembro del Partido Comunista Británico que siguieron la línea del Partido Comunista de la Unión Soviética], Trotskistas [Trots], Marxistas-Leninistas, Estalinistas, Maoístas, Anarco-Comunistas…

Si usted es usuario de los medios sociales, ciertamente se ha encontrado con algunas de las subculturas de la izquierda extrema que en ellos florecen, tal vez al mirar su drama con una mezcla de desconcierto, fascinación morbosa, y desprecio perplejo.

Si alguna vez se preguntó cuáles son las diferencias entre estas diversas facciones, y cómo ellas se relacionan entre sí, ha venido al lugar correcto. Con el paso de los años me he convertido en una especie de connnoisseur del comunismo, y, en este artículo, trataré de ofrecer una taxonomía simplificada de los Marxistas en línea. No pretendo ser exhaustivo o profundo, pero, en todo caso, debería ser buen punto de inicio.

TANKIES

(Subcategorías: Estalinistas, Maoístas, fanáticos de Corea del Norte, Hoxhaístas, Gonzaloístas)


En cierto sentido, los Tankies son el opuesto de la gente que describí en mi libro, Socialism, The Idea That Never Dies. Ese libro era principalmente acerca de gente que alega que el socialismo “verdadero” se ha nunca intentado, y que ninguno de los regímenes que se llamaron a sí mismos socialistas, en realidad eran socialistas, de la forma en que Marx lo había previsto.

Los Tankies creen lo opuesto. Creen que el socialsimo “verdadero” ha sido tratado muchas veces, y que en cada ocasión ha sido un éxito tremendo. Creen que virtualmente todos los regímenes que se llamaron a sí mismos “socialistas,” eran en realidad socialistas, y que Marx los habría aprobado a todos ellos.

Si bien reconocen algunos aspectos negativos de esos regímenes (como hambrunas y otros inconvenientes menores), los Tankies dirían que aquellos nada tuvieron que ver con el sistema económico, sino que fueron resultado de sabotaje interno y externo. También, los Tankies dirían que los estados socialistas que ya no más existen no han “fracasado” o “colapsado,” sino que los derrocaron fascistas contrarrevolucionarios.

¿Qué hay acerca de los millones que fueron asesinados bajo diversos regímenes socialistas? Los Tankies dirían que los números se han exagerado por propagandistas capitalistas, pero que, en tanto en que sucedió, se justificaba. La gente asesinada bajo Stalin, Mao et al eran contrarrevolucionarios, y, por tanto, asesinarlos tenía “una base.”

Los Tankies puede subdividirse aún más en una cantidad de subgrupos (traslapados), siendo los mayores los Estalinistas, Maoístas y fanáticos de Corea del Norte. Algo inusual para la izquierda extrema, estos subgrupos diferentes no se odian entre sí. Difieren más en el énfasis y estética que en la substancia. Los Tankies Estalinistas son también amigos de la China Maoísta y, los Tankies Maoístas son también amigos de la Rusia Estalinista. Es sólo que los primeros tienen una fascinación particular por la Rusia Estalinista, y los últimos por la China Maoísta.

Originalmente la palabra “Tankie” fue una referencia al aplastamiento del levantamiento húngaro por tanques soviéticos en 1956. Esta intervención fue enormemente dañina para la reputación internacional de la Unión Soviética y acabó con la mayoría de las simpatías pro soviéticas existentes entre intelectuales de Occidente. Pero, unos pocos de línea dura mantuvieron la fe: los “Tankies” originales.

El surgimiento de una subcultura Tankie en línea es en respuesta a lo que se podría llamar las “ideas de moda entre jóvenes” acerca del Marxismo; es decir, el grado en que la ideología Marxista se ha convertido en moda cómplice, que la gente la adopta pues es considerada “genial [cool]” y “en onda [hip]”

La gente de la izquierda extrema por mucho tiempo ha pensado de sí misma como una contracultura radical opuesta a la corriente principal. Pero, al mismo tiempo, cuando revistas de moda regularmente pasan artículos al pie de la letra alabando al Marxismo, se hace más difícil conservar esa autoimagen. ¿Qué tan contracultural es realmente usted, cuando todo lo que usted dice puede también ser publicado en “Teen Vogue”?

Así que, es el viejo problema de la contracultura que se hace demasiado popular por su propio bien: ¿Qué hacen los protagonistas de una contracultura cuando millones se les unen, convirtiéndola así en la cultura de la corriente principal?

En una ocasión vi una entrevista en MTV con un envejecido músico de rock que habló con cierta tristeza del hecho que a tipos como él se les había imposibilitado impactar. Todas las cosas que se consideraban “atrevidas” y “contraculturales” cuando empezó su carrera, se habían convertido totalmente en la corriente principal en el ínterin.

Esa es, precisamente, la situación en que los Marxistas se hallan hoy, y en ninguna otra parte más que en los medios sociales. Si usted es conservador o libertario es sumamente fácil provocar una reacción adversa, aún si usted en particular no la quiere, pero, si usted es un izquierdista que quiere provocar eso ̶ ¿qué podría decir? Alabar a dictadores asesinos en masa es, más o menos, la única cosa que queda.

Dicho eso: en algunas esquinas de medios sociales, hasta el Estalinismo, el Maoísmo y el fanatismo por Corea del Norte se han convertido en demasiado de la corriente principal, razón por la que algunos Tankies están buscando versiones más excéntricas de su ideología, como el “Hoxhaísmo” y el “Pensamiento de Gonzalo.”

Los Hoxhaístas son fanáticos del anterior dictador de Albania Enver Hoxha, quien cayó en desgracia con la Unión Soviética y aliados del Bloque Oriental, pues ya no más eran lo suficientemente puristas para él. Los Gonzaloístas son fanáticos de Sendero Luminoso, un grupo terrorista maoísta que opera en Perú.

El “partido Tankie” del Reino Unido es el Partido Comunista de la Gran Bretaña (Marxista-Leninista) (CPGB-ML por sus siglas en inglés), una ramificación del Partido Laborista Socialista de Arthur Scargill (SLP por sus siglas en inglés).

MARXISTAS ADYACENTES A LOS TANKIES

Los Marxistas Adyacentes a los Tankies (TAMs por sus siglas en inglés) son gente que se detiene justo antes de glorificar a Stalin, Mao, Kim Il Sung, et al. Ellos aceptan que ha habido “excesos” y “fallas en la justicia” bajo regímenes socialistas. Pero, mantienen que esos han sido exagerados, que por igual debemos ver el lado positivo, y que, en todo caso, los “excesos” fueron resultado de circunstancias desafortunadas.

En vez de defender abiertamente los asesinatos comunistas, los TAMs prefieren involucrarse en “¿Qué es lo que pasa?” ¿Usted piensa que los Gulags fueron malos? Muy bien, pero, ¿qué acerca de las atrocidades en el Congo Belga? ¡Divertido que no mencionara eso! ¿Es usted un apologista del Rey Leopoldo II?

Los más conocidos TAMs en el Reino Unido son Seumas Milne y Andrew Murray, los previos gurúes del Corbynismo [por Jeremy Corbyn, líder del partido laborista inglés entre el 2015 y el 2020], así como la profesora Susan Michie del Grupo de Asesores Científicos para Emergencias (SAGE por sus siglas en inglés). Murray y Michie son miembros del Partido Comunista de Gran Bretaña (CPB por sus siglas en inglés)

Los Tankies “puros” consideran a los TAMs como demasiado suaves y no confiables. Entre tanto, los últimos prefieren simplemente ignorar a los primeros.

LOS TROTSKISTAS

Los Trotskistas creen que la Revolución Rusa fue un proyecto noble y que, en realidad, en esos primeros días la Unión Soviética era un apropiado “estado de los trabajadores,” manejado por la clase trabajadora, para la clase trabajadora.
Pero, en algún momento, los trabajadores perdieron el control sobre su estado, y la burocracia soviética se convirtió en la nueva élite gobernante. (Básicamente la historia de Orwell, Animal Farm [La rebelión en la granja].)

El argumento fue primeramente hecho por Leon Trotsky, uno de los actores clave en la Revolución Rusa y la Unión Soviética temprana, quien luego se convirtió en disidente en el exilio. El título de su libro más famoso resume al Trotskismo: “The Revolution Betrayed” [“La revolución traicionada”].

Así, podríamos decir que los Trotskistas están en alguna parte entre los Tankies y la gente de mi libro de que el socialismo verdadero nunca ha sido intentado. A diferencia de los primeros, los Trots del todo nunca endosarían regímenes socialistas. Pero, a diferencia de la última, ellos tampoco lo negarían del todo. Es más algo así como una filosofía de “A mí me gusta su trabajo temprano, pero…” El socialismo “verdadero” ha sido intentado, pero nunca ha permanecido siendo verdadero por mucho tiempo.

Hoy, los Trotskistas tratan de aplicar el mismo molde a hechos más recientes. Paul Mason, por ejemplo, en esencia ofrece lo que es una descripción Trotskista de los años de Corbyn. En su versión de los acontecimientos, los activistas de las bases perdieron el control de su proyecto, cuando la burocracia corbinista tomó el control. Otros Trotskistas han expresado argumentos similares acerca del gobierno de Syriza en Grecia, o los Chavistas en Venezuela, o el Movimiento de Occupy Wall Street.

En esencia, los Trotskistas son buscadores de novedades, atraídos por la estética de la protesta y rebelión. En especial, los atraen movimientos de jóvenes que aún no están tan bien definidos, y, por tanto, susceptibles a la proyección ideológica. Pero, tan pronto como se acaba la emoción de la novedad, y un movimiento se hace un poco más profesionalizado, rápidamente los Trots pierden el interés en él. Luego, alegarán que el movimiento ha sido “traicionado” o “corrompido,” y se mueven hacia la siguiente causa.

El partido Trotskista más conocido en Gran Bretaña es el Partido de los Trabajadores Socialistas (SWP por sus siglas en inglés). También está el Partido Socialista (SP por sus siglas en inglés), mejor conocido por el nombre previo “Militante” o “la tendencia Militante,” que solía ser un grupo Trotskista dentro del Partido Laborista, hasta que Neil Kinnock los dejó ir. Más recientemente, otro grupo Trotskista dentro del Laborismo, el Llamado Socialista, obtuvo el mismo tratamiento de Kinnock por parte de Keir Starmer.

Los Tankies, TAMs, y Trots, todos, alegan para sí mismos la etiqueta de “Marxista-Leninista,” al verse, respectivamente, como los verdaderos herederos de esa tradición.

Si bien los Trots y Tankies se odian entre sí con pasión, los Trots pueden llevarse bastante bien con los TAMs. La Coalición para Detener la Guerra (StWC por sus siglas en inglés) fue establecida en esencia como una empresa conjunta del SWP y el CPB (entre otros).

Continuará en la Parte 2…

Kristian Niemietz es Director de Economía Política en el Instituto de Asuntos Económicos de Inglaterra.

Traducido por Jorge Corrales Quesada.