Este es un artículo muy interesante, que presenta otras explicaciones o hipótesis alternativas a acontecimientos sucedidos con la obligatoriedad de la vacunación que algunos pretenden. Puede que del todo no se compartan algunos aspectos del artículo, pero obliga a pensar en torno al razonamiento que formula el autor.

EL AUTORITARISMO VACUNATORIO EXPLICADO

Por Max Borders
American Institute for Economic Research
6 de noviembre del 2021

Nota del traductor: la fuente original en inglés de este artículo es max borders american institute for economic research authoritarianism, November 6, 2021. En él podrá leer enlaces relevantes originalmente en letra azul en el texto.

"Este es el comportamiento que señala y escoge preceptos de ambos síndromes [apoderamiento e intercambio], creando monstruos morales híbridos.” Jane Jacobs, de Sistems of Survival [Sistemas de supervivencia]

Revelación: Estoy vacunado contra el Covid-19. Así que, permítanme inocularme contra cualquier cargo de que soy un “anti vacuna.” No lo soy. Sin embargo, me uno a millones de personas en el mundo que se sienten incómodas con las órdenes de vacunación, como aquellas emitidas por la administración Biden y por estados como California. Primeramente, deberíamos preguntar si las órdenes tienen sentido desde una perspectiva de salud pública. Luego, si no lo tienen, queremos tratar de obtener una idea de por qué las autoridades redoblarían esfuerzos de medidas con una justificación tan débil de salud pública.

LAS ÓRDENES NO TIENEN SENTIDO APARENTE

Antes de sumergirnos en la economía política de aquello que se escabulle del lecho coital del gobierno y farmacéuticas, necesitamos brevemente entrar en las razones de por qué no tiene sentido el caso actual de “salud pública” para órdenes y pasaportes.

1. Los niños en edad escolar actualmente tienen riesgos insignificantes de Covid-19.
Someter a niños a riesgos como miocarditis, pericarditis y trombosis, no importa qué tan pequeño sea el riesgo, no está fundamentado en alguna evaluación racional de los datos reales acerca de riesgos de enfermedad por Covid en niños. Así, el argumento principal de obligatoriedad de vacunar a niños es que protege a adultos. No sólo las vacunas para el Covid tienen una efectividad disminuida a través del tiempo, sino que, también, hacen muy poco contra la transmisibilidad después de sólo dos meses, en especial contra las variantes que actualmente asolan al mundo. Casos innovadores son legión, y una efectividad que se desvanece está bien documentada. (Revelación 2: A pesar de estar vacunado, contraje el Covid y se lo pasé a mi compañera vacunada y niños no vacunados.) Por supuesto, nadie ha estudiado los efectos a largo plazo de una vacunación masiva ARN mensajero ya sea en adultos o niños, e incluso las pruebas clínicas en niños son dudosas. Así que, es extraño escuchar que los refuerzos usuales (no es broma) de un estado regulatorio más expansivo, quieren moverse con todo el impulso para imponer terapias experimentales en niños.

2. Obligaciones de vacunación introducen riesgos
innecesarios a cientos de millones de estadounidenses que se han recuperado de Covid. Estudio tras estudio (y tras otro) demuestran que la gente que se ha recuperado del Covid-19 tiene una inmunidad robusta, duradera, que es tan buena o mejor que la inmunidad por vacuna. No hay razón para que gente con inmunidad natural deba ser compelida a sufrir alguna terapia, cuyos efectos a largo plazo no se conocen. No importa que la magnitud de los riesgos conocidos aún esté siendo estudiada. (Un profesor de derecho recuperado del Covid está demandando a su universidad sólo por dicha orden).

3. Las órdenes de vacunación son cuestionables incluso para quienes todavía no han contraído el Covid-19.
¿Por qué? Es muy sencillo: los adultos deberían ponderar los riesgos conocidos y no conocidos de cualquier decisión médica con ellos y buscar tratamiento temprano conocido si contraen el virus. Como señalé arriba, el caso a favor de la protección comunitaria basada en una vacuna es débil y se va haciendo más débil conforme pasan los días. Francamente, es extraño que estemos viviendo en una época en que autoridades se imaginan que está bien obligar a todos a experimentar terapias que aún se consideran experimentales. Decir esto no es afirmar que terapias experimentales riesgosas no deberían ser una alternativa para la gente en una pandemia; es simplemente argüir contra la obligatoriedad.

Las buenas noticias son que millones de personas alrededor del mundo están en una rebelión abierta contra esas órdenes y las autoridades que las emiten. Y la alianza rebelde no es sólo una bandada de anti vacunas. Gente de consciencia, tanto vacunada como no vacunada, piensa que esas órdenes son erradas. Los apparatchiks de los medios de la corriente principal continuarán vendiendo charlas de debates para justificar esas medidas autoritarias, pero los muchos no vacunados no se los tragan. Hallazgos científicos actuales y más de 13.000 médicos apoyan su intransigencia.

Dado que una investigación extensa milita contra la supuesta racionalidad para las órdenes de vacunación, debemos preguntar: Entonces, ¿por qué? La respuesta puede tener algo que ver con la dinámica de la economía política.

SIGA EL DINERO

Asumiendo el riesgo de sobre simplificación, voy a contar una historia. Usaré información fácilmente asequible para formar una cronología y una hipótesis aproximada que evoca la Teoría de la Elección Pública tradicional. Para el no iniciado, la Teoría de la Elección Pública es una rama de la economía que trata del comportamiento de actores que operan en una matriz fuera de las condiciones normales del mercado, tales como dentro del ámbito político.

Nuestra historia empieza en Wuhan, China: diciembre del 2019. O así parece serlo. Ahí, un virus misterioso había empezado a reclamar vidas. (Como verán, tendremos que regresar un poco más atrás que eso.) Aún así, en diciembre del 2019, el mundo había empezado a notarlo. El virus pronto se diseminó más allá de China, y, para febrero del 2020, la pandemia arrasaba globalmente.

En enero del 2020, una pequeña empresa poco conocida llamada Moderna desarrolló su vacuna ARN mensajero con una donación de BARDA (una agencia dependiente del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos), pero en colaboración estrecha con NIAID, la agencia federal de enfermedades infecciosas encabezada por Anthony Fauci. En efecto, los Institutos Nacionales de Salud (NIH por sus siglas en inglés), comparten la patente con Moderna. Dicho esto, los funcionarios del gobierno gastaron $2.5 miles de millones para llevar a Moderna al mercado, con casi $ mil millones yendo a investigación y desarrollo. El 15 de marzo del 2020, Moderna/NIAID enviaron su vacuna mRNA para pruebas clínicas, lo cual significa que esta investigación había empezado, o sido acelerada, a un ritmo no conocido para la mayoría de las burocracias.

Los lectores notarán que sólo seis semanas después del inicio de las pruebas clínicas de Moderna/NIAID, el director de NIAUD Anthony Fauci mantuvo un contacto cercano con actores claves involucrados en un programa multianual, que incluía investigación riesgosa de ganancia de función. Los intercambios culminaron en una ahora famosa conferencia telefónica, un sábado 1 de febrero del 2020. Esa llamada incluía al microbiólogo de la Scripps Research, Kristian G. Andersen, quien había advertido a Fauci en un correo electrónico un par de días antes, que
“Algunas de las características (potencialmente) parecen ser producto de ingeniería.” Scripps Research no es un extraño en usar y supuestamente usar mal la generosidad de los NIH, así que no sorprende que Andersen se refiriera a todas las teorías de fugas de laboratorio o virus resultado de ingeniería, como “teorías alocadas.”

También, presente en esa teleconferencia estaba el director de los NIH, Francis Collins, quien, en medio de llamadas crecientes para despedir a Fauci, recientemente renunció a su propio puesto.

Junto con Fauci, en el centro de las preguntas relacionadas con la investigación de ganancia de función, está Peter Daszak. Su entidad sin fines de lucro, EcoHealth Alliance, dirigió $600.000 en donativos de la NIAID al laboratorio de Wuhan entre el 2014 y el 2019, como parte de una donación para estudiar el coronavirus en murciélagos. Daszak le escribió a Fauci, en los días después de la teleconferencia del sábado, para agradecerle por usar su autoridad para descartar la teoría de fuga del laboratorio y propagar la teoría de los orígenes naturales del SARS-CoV2. También, Daszak estaba detrás de la publicación de una carta a la venerable revista Lancet en la que los firmantes denunciaron la teoría de la fuga del laboratorio e impulsaron la noción de un origen natural. Antes de la publicación de la carta, Daszak le había escrito a un co conspirador así:

“La sacaremos de una forma que no la liga de regreso a nuestra colaboración, así que maximizamos una voz independiente.”

Posteriormente, The Lancet condenó la carta, citando conflictos de interés.

Como se mencionó, la EcoHealth Alliance de Daszak también había sido receptora de financiamiento para investigación sobre la que Fauci tenía una supervisión. No sólo Daszak falló en revelar una propuesta a DARPA de donación para EcoHealth Alliance -que fue negada pues su investigación postulaba peligros inquietantemente similares a aquellos del actual virus pandémico- pero, Daszak se permitió ser instalado como uno de los principales investigadores de la OMS, encargados de echar una mirada al Laboratorio de Wuhan como un origen potencial.
La gentuza se refiere comúnmente a esto como el zorro cuidando al gallinero.

LA CONEXIÓN CON MODERNA

Ahora, perdone la interrupción, pero, ¿qué sobre la tierra tiene que ver todo lo de arriba con las órdenes de vacunación?

En uno de los intercambios de correos electrónicos descubiertos por una petición basada en la Ley de Libertad de Información de Judicial Watch, un correo electrónico del 2 de enero del 2020, iniciado por funcionarios de los NIH, incluía un “Reporte acerca de la Neumonía de Wuhan” junto con un cronograma del brote inicial en China hasta ese momento. También, el reporte detalla un portafolio administrado por nada más que Peter Daszak, de la sin fines de lucro EcoHealth Alliance.

“Peter Daszak (R01A /110964-06) está financiado para trabajar en entender cómo evolucionan los coronavirus y saltan hacia las poblaciones humanas, con énfasis en un murciélago de CoV y poblaciones de alto riesgo en la interfase humana-animal. Muchos sitios externos están en China (incluyendo coinvestigadores en el Instituto de Virología de Wuhan).”

Dichos “coinvestigadores” incluían la investigadora Fang Li del Instituto de Virología de Wuhan, quien llevaría cabo investigación que suena conspicuamente similar a lo que la gente laica ahora se refiere como “ganancia de función.” Pero, también, el intercambio describe otra donación a “un equipo de investigadores que usa ratones de modelos del SARS y MERS para investigar la patogénesis del CoV y desarrollar vacunas y terapéuticas.” Ratones quiméricos o “humanizados” usados en la investigación de Wuhan/EcoHealth Alliance ahora están siendo objeto de gran escrutinio como vectores potenciales de la pandemia, contradiciendo testimonios de Fauci ante el Congreso.

Luego, en una sección del reporte llamada simplemente “Vacunas,” los autores del NIH escriben:

“El Centro de Investigación de Vacunas (VRC por sus siglas en inglés) y colaboradores han estabilizado una proteína conocida como espícula en su conformación previa a la fusión. Esta proteína estabilizada conocida como espícula es potencialmente inmunogénica y provoca anticuerpos protectores para el dominio que liga al receptor, un dominio n terminal y otras superficies de la proteína conocida como espícula. La proteína conocida como espícula del coronavirus estabilizado, y el ARN mensajero que expresa la proteína conocida como espícula a través de colaboración con Moderna Therapeutic, actualmente se está evaluando en el modelo humanizad de ratón DPP4 en la Convención Universal de Nombres (UNC por sus siglas en inglés).” (Énfasis es mío).

Es innecesario decirlo, pero es extraño que la empresa recién creada Moderna haya estado en el centro de toda esta investigación paralela acerca del coronavirus en murciélagos, durante años que condujeron al brote de Wuhan, y así fue inseparable con el NIAID de Fauci.

LA ARROGANCIA FATAL Y LOS HÍBRIDOS MONSTRUOSOS

Para ser justo, la visión de “ganancia de función,” que Anthony Fauci siempre ha apoyado a plenitud, era figurarse cómo desarrollar un arsenal de terapéutica para combatir algún virus determinado que puede saltar desde un animal a un humano. Toda la premisa idealista ha sido que los investigadores recolectarían el virus y encontrarían candidatos posibles para la zoonosis en el laboratorio. Luego, las autoridades podrían financiar laboratorios para crear vacunas. Como escribe Fauci en el 2012:

“Científicos trabajando en este campo pueden decir -y, de hecho, como yo lo he dicho- que los beneficios de tales experimentos y el conocimiento resultante se sobrepone a los riesgos. Es más posible que una pandemia ocurriría en la naturaleza, y, la necesidad de estar por delante de esa amenaza, es una razón primordial para desempeñar un experimento que pueda parecer riesgoso.”

Una interpretación más cínica de lo de arriba puede ser que estos interesados se beneficiarían con un golpe serio de advertencia como la pandemia del Covid-19. Pero, una comprensión más caritativa de los acontecimientos es que, el deseo de Fauci de salvar al mundo de patógenos, ha sido reivindicado, de hecho, acelerado, por un accidente extraño en Wuhan que sólo ellos podían limpiar. Esta última interpretación sólo tendrá validez si se pensaba que el virus emergería naturalmente. De otra forma, el equivalente político de “Oigan, lanzamos un fósforo en la selva, así que nosotros los bomberos vamos ahora a sacar nuestras mangueras,” caería entre el pueblo como una bola de plomo ̶ y por las razones que Fauci había anticipado mucho tiempo atrás.
Ellos sabían que era mejor que ordenaran sus historias.

Así, en las mentes de ejecutivos de Moderna, como el supuestamente despiadado gerente general de Moderna Stéphane Bancel y sus socios en los NIAID, incluyendo a Fauci, el tren de la vacuna ya había partido de la estación. Era un sueño tecnocrático, una sociedad público-privada para toda la humanidad. Los medios crédulos, piadosos, continuaron adulando a Fauci a lo largo del 2020 y bien dentro del 2021. Recuerden, hasta este momento de la historia, ninguna vacuna ARN mensajero había sido desplegada para las masas. No obstante, la reputación de Fauci como papa de la salud pública le colocó directamente en la posición de Tecnócrata en Jefe en lo referente a la pandemia y en cómo controlarla. Moderna estaba para obtener una tonelada métrica de dinero, por encima de la generosidad invertida que Fauci había dirigido a la empresa que iniciaba en los años conducentes a la pandemia. Pero, ¿quién podría resentir que un héroe salvador de vidas se convirtiera en multimillonario?

CONTRABANDISTAS DE LICOR, BAUTISTAS Y ÓRDENES DE VACUNACIÓN

No voy a ir tan lejos como especular que Anthony Fauci, por poder, puede estar desplegando un Munchausen [Este síndrome se define como “cuando alguien miente diciendo que otra persona muestra signos y síntomas físicos o psicológicos de enfermedad, o le provoca lesiones o enfermedades a otra persona con la intención de engañar a los demás”] en escala social, aunque algunos han ido hasta allí. Aún así, no pienso que sea una extensión decir que Fauci y sus funcionarios se han comportado de forma que le da plausibilidad a la ortodoxa Teoría de la Elección Pública, en específico, la teoría de los Contrabandistas de licor y los Bautistas.

En 1983, el economista Bruce Yandle desarrolló el marco de los Contrabandistas de licor y los Bautistas, para explicar su creencia de que una acción gubernamental duradera tiende a surgir con el apoyo de dos tipos de grupos de interés: aquellos con intereses morales y aquellos con intereses financieros. Yandle apela a leyes prohibitivas de principios del siglo XX, que prohibían la venta de licor los domingos. Los Bautistas, los moralistas, estaban motivados por sus creencias de que los domingos se deberían respetar como un día de oración y descanso, sin tomar licor. También, los Contrabandista de licor apoyaron la prohibición, pero sólo porque disfrutarían de un mercado negro en auge en esos días y obtendrían ganancias por ventas ilegales de licor. La acción gubernamental duradera, según Yandle, tiende a emerger con el apoyo de coaliciones que comparten un bien común, aun cuando no comparten motivaciones en común.

En una pandemia global, no ha sido difícil encontrar una plétora de piadosos de la salud pública. Tampoco ha sido difícil encontrar quienes con ello obtienen ganancias, en especial en la industria farmacéutica. Dudo que Anthony Fauci tiene algunos intereses financieros en la vacuna Moderna/NIAID ̶ aunque los investigadores deberían mirar. Él está allí por la gloria. Aún así, la sociedad Moderna/NIAID pone a los Contrabandistas de licor y a los Bautistas en el mismo equipo.

Fauci, el presidente Biden, y todos los otros centinelas de los medios de comunicación de la corriente principal, son los moralistas en esta ecuación; esto es, si el profesor Yandle permitirá una línea no muy clara entre moralismo y complejo de salvador. Ellos quieren ser conocidos como los que destruyeron la pandemia. Uno incluso puede decir que Fauci ha estado planeando esto durante toda su carrera. Ahora, él nos honra con su presencia diaria en programas para ver en casa, como The View, alumbrado por las luces, recordándonos que usemos mascarillas y que nos vacunemos.

El decrépito Biden, aunque necesita de ayuda para montarse a un caballo, una vez que lo domina, mantiene a mano su poderosa pluma ejecutiva y ordena a multitudes vacunarse o sufrir las consecuencias. Esperando a los lados están figuras corporativas en las sombras, como Bancel de Moderna, preparadas para ejecutar esos planes tecnocráticos usando miles de millones de dólares entintados de deuda. Aunque los ladridos contra las Grandes Farmacéuticas en una época eran prominentes en el Guion Progresista, aquellos han sido misteriosamente redactados, como los correos electrónicos de Fauci obtenidos por medio de la Ley de Libertad de Información. Cuando uno se detiene a pensar que esos miles de millones tienen que ser repagados por esos mismos niños que no podrán elegir, sino ser vacunados obligatoriamente, con menor posibilidad del Covid, uno puede encontrar esa idea como nauseabunda. Sin embargo, un pensamiento que altera más es que Fauci probablemente sospechó todo el tiempo que el financiamiento de los NIH condujo a la creación y liberación (accidental) de un virus que ha matado a 5 millones de personas, al momento de escribir esto.

Anthony Fauci es un monopsonio en el financiamiento de la investigación de enfermedades infecciosas. Él claramente no quiere ser conocido como el tipo a cargo del financiamiento de la pandemia, aunque lo fuera inadvertidamente. Su defensiva, sus falsedades ante el Congreso, y su atracción a las luminarias de las cámaras ̶ todo parece revelar un hombre que, en su moralismo, se rehúsa a reconocer que su agencia tuvo alguna mano en el daño causado por el Covid. Él quiere ser el médico de Estados Unidos, y su plan grandioso siempre ha sido vacunar al mundo. En su escenario favorito, él no sería vislumbrado como un burócrata negligente, sino como un salvador. Pero, él lo quiere mantener así. ¿Los investigadores? ¿Los intermediarios? ¿Los ejecutivos de las farmacéuticas? Ellos están ahí por el dinero del que dependen sus carreras.

Por tanto, mi hipótesis, tentativa pero atrevida, es que el economista Bruce Yandle debe haber visto que esto venía desde una milla atrás. Las órdenes de vacunación del 2020-2021 es una historia de los Contrabandistas de licor en colusión con los Bautistas. Así, la única pregunta que permanece es si vamos a dejar que ellos se salgan con la suya.

Max Borders es autor de After Collapse: The End of America and the Rebirth of Her Ideals y de The Social Singularity: A Decentralist Manifesto. También, Max es cofundador del acontecimiento experiencia Future Frontiers y fundador de Social Evolution, una organización dedicada a liberar a la humanidad y resolver problemas sociales por medio de la innovación.

Traducido por Jorge Corrales Quesada.