Todos podemos aprender, con un esfuerzo, a ser más personas lógicas. He aquí 10 buenas, claras y sencillas sugerencias.

LOS 10 HÁBITOS DE LAS PERSONAS LÓGICAS

Por Daniel Lattier
Fundación para la Educación Económica
Domingo 21 de enero del 2018


NOTA DEL TRADUCTOR: Para utilizar los ligámenes de las fuentes del artículo, entre paréntesis y en rojo, si es de su interés, puede buscarlo en su buscador (Google) como daniel lattier foundation for economic education logic January 21, 2018 y si quiere acceder a las fuentes, dele clic en los paréntesis rojos.

La persona auténticamente lógica mantiene su lógica enraizada en la verdad y nunca deja que se convierta en un simple truco verbal.

Llegar a ser una persona lógica no es sólo una manera de memorizar y aplicar fórmulas, o aprender cómo decir la diferencia que hay entre un silogismo válido y uno inválido. [Nota del traductor: silogismo es un “razonamiento que está formado por dos premisas y una conclusión que es el resultado lógico que se deduce de las dos premisas”]. Más bien, involucra cultivar hábitos y habilidades intelectuales que, aunque ellos puedan parecer ser simples y obvios, sólo se logran después de años de lucha y educación.

En su libro Being Logical: A Guide to Good Thinking, el venerable profesor de filosofía D.Q. McInerny expone los siguientes 10 hábitos que las personas deben cultivar, si es que desean pensar clara y efectivamente:

1) ELLAS ESTÁN ATENTAS.

“Muchos errores al razonar se explican por el hecho de que no estamos prestando suficiente atención a la situación en que nos encontramos,” escribe McInerny. La persona lógica se ha entrenado a sí misma a siempre poner atención a los detalles -aun en situaciones que son familiares- par que no haga un juicio descuidado.

2) ELLAS CONSIGUEN TODOS LOS HECHOS CORRECTOS.

“Si un hecho específico es una cosa realmente existente a la cual tenemos acceso, entonces, la forma más segura de establecer su condición de objeto es ponernos en su presencia. Entonces, así tenemos evidencia directa de ella. Si no podemos establecer su objetividad mediante evidencia directa, debemos rigurosamente poner a prueba la autenticidad y confiabilidad de cualquier evidencia indirecta a la que apelamos, de forma que, con base en esa evidencia, podamos establecer con confianza la objetividad de la cosa.”

3) ELLAS SE ASEGURAN DE QUE SUS IDEAS SEAN CLARAS.

Nuestras ideas son los medios mediante los que nuestras mentes entienden al mundo objetivo. Ideas claras reflejan fielmente ese mundo, mientras que ideas que no son claras nos dan una visión distorsionada del mundo. La persona lógica constantemente está poniendo a prueba sus ideas, para asegurarse que ellas describen correctamente sus objetos.

4) ELLAS ESTÁN CONSCIENTES DE LOS ORÍGENES DE LAS IDEAS.

La persona lógica sabe que sus ideas están basadas en cosas que en realidad existen en el mundo. Sabe, por ejemplo, que su idea de un “gato” corresponde a cosas en el mundo objetivo conocidas como “gatos.” Como un contraejemplo, hay mucha gente que tiene una idea de que existió una papisa llamada Juana en el siglo IX. Pero, si pasaran tiempo buscando {la fuente de esa idea, encontrarían que es ampliamente considerado por historiadores respetables que se originó en una leyenda.

5) ELLAS HACEN COINCIDIR LAS IDEAS CON LOS HECHOS.

Escribe McInerny, “Para impedir que mi idea sea producto de puro subjetivismo, en cuyo caso no podría ser comunicada a otros, debo continuamente estar en contacto con los numerosos hechos en el mundo objetivo, de donde nació la idea.” Esto es fácil hacerlo con ideas que tienen una correspondencia simple con cosas en el mundo externo a nuestras mentes (por ejemplo, mi idea de “gato” se refiere a un gato real). Es mucho más difícil, como todos lo hemos experimentado, con ideas complejas como capitalismo o socialismo o liberalismo y estatismo. [Esas palabras en inglés se traducirían literal y respectivamente por conservadurismo y liberalismo. Yo las traduzco en el sentido europeo y latinoamericano general]. Para que estas ideas se mantengan sólidas, deben constantemente ser ligadas, y apoyadas, por hechos que sean accesibles a todos.

6) ELLOS HACEN COINCIDIR LAS PALABRAS CON LAS IDEAS.

Sólo podemos comunicar nuestras ideas a otros si usamos palabras que transmiten exactamente esas ideas. Pero, encontrar las palabras correctas puede ser difícil. Cuando surge la dificultad, deberíamos regresar a las fuentes:

“¿Cómo nos aseguramos que nuestras palabras son adecuadas a las ideas que ellas buscan transmitir? El proceso es esencialmente el mismo que seguimos cuando confirmamos la claridad y solidez de las ideas. A menudo, no podemos venir con la palabra correcta para una idea, pues no tenemos una noción firme de la idea en sí. Usualmente, cuando aclaramos la idea al confirmarla ante su fuente en el mundo objetivo, la palabra correcta vendrá hacia nosotros.”

7) ELLAS SE COMUNICAN EFECTIVAMENTE.

En última instancia, la lógica es acerca de determinar si las afirmaciones son ciertas o falsas. Si otros son quienes determinan la verdad de la afirmación, es necesario que esta les sea comunicada de una manera clara.
McInerny ofrece las siguientes guías para una comunicación clara:

• No asuma que la audiencia entiende su sentido si usted no lo hace explícito.
• Hable con frases completas.
• No maneje declaraciones evaluativas (por ejemplo, “Ese trabajo de arte es horrendo”) como si fueran declaraciones de un hecho objetivo.
• Evite los negativos dobles.
• Ajuste su lenguaje a su audiencia.

8) ELLAS EVITAN UN LENGUAJE VAGO Y AMBIGUO.

“Vago” y “ambiguo,” ambos, vienen de palabras latinas que significan “deambular.” Un lenguaje vago y ambiguo tiende a dar vueltas alrededor de las ideas, en vez de tener un significado fijo, definido. Una persona lógica usa un lenguaje preciso de forma que, quien le escucha, sabe exactamente acerca de qué está diciendo de ella y puede evaluar adecuadamente la verdad de sus afirmaciones. Si la persona lógica se refiere a términos más complejos como “libertad” o “igualdad,” ella se asegura que se establezca un entendimiento particular de esos términos.

9) ELLAS EVITAN EL LENGUAJE EVASIVO.

“El problema con el lenguaje evasivo, un lenguaje que no afirma con franqueza lo que un orador o un escritor tiene en mente, es doble. Primero, y obviamente, puede engañar a una audiencia. Segundo, y más sutilmente, puede tener un efecto perjudicial sobre la gente quien lo usa, al distorsionar su sentido de la realidad. El usuario le da forma al lenguaje, pero, asimismo, el lenguaje le da forma al usuario. Si usamos consistentemente un lenguaje que sirve para distorsionar la realidad, tarde o temprano, llegamos a creer en nuestra propia retórica distorsionada.”

10) ELLAS BUSCAN LLEGAR A LA VERDAD DE LAS COSAS.

El propósito de la lógica, de acuerdo con McInerny, es llegar a la verdad de las cosas. Él explica que hay dos formas básicas de verdad: la verdad “ontológica” ̶ lo que en realidad existe y tiene una existencia real; y la verdad “lógica” ̶ la verdad de las afirmaciones. En última instancia, él nos recuerda que, “Lo que determina la verdad o falsedad de una afirmación es lo que realmente existe en el mundo real. La verdad lógica, en otras palabras, está basada en la verdad ontológica.”
La persona auténticamente lógica mantiene su lógica enraizada en la verdad y nunca deja que se convierta en un simple truco verbal.

Reimpreso de Intellectual Takeout.

Daniel Lattier es antiguo compañero sénior de Intellectual Takeout. Obtuvo su B.A. en Filosofía y Estudios Católicos de la Universidad de Santo Tomás (Minnesota) y su M.A. y PhD. en Teología Sistémica de la Universidad Duquesne en Pittsburgh, Pennsylvania.

Traducido por Jorge Corrales Quesada.