Totalmente justificada la manifestación contra una clara violencia policial que mató a una persona sin razón alguna. Defiendo la libertad de expresión. No justifico la destrucción causada por algunos. No sólo porque afectaron negocios como los indicados en el artículo, sino que muchos otros quedaron en cenizas. Posiblemente no volverán y mayor será la miseria en esas comunidades en donde se realizaron esos saqueos. Como dicen, es “cuchilla para su propio pescuezo.”

Es hora de que en Estados Unidos se terminen incentivos que conducen a aquella conducta totalmente inaceptable de la policía, como por ejemplo la existencia de una inmunidad a demandas por acciones policiales, cuya permanencia es defendida por los sindicatos policiales y ciertos políticos.

HE AQUÍ SÓLO 10 DE LOS MUCHOS NEGOCIOS PROPIEDAD DE GRUPOS MINORITARIOS DESTRUIDOS EN LOS MOTINES

Por Brad Polumbo
Fundación para la Educación Económica
Viernes 5 de junio del 2020

NOTA DEL TRADUCTOR: Para utilizar los ligámenes de las fuentes del artículo, con letras en rojo y entre paréntesis, si es de su interés puede verlo en https://fee.org/articles/here-are-ju...-in-the-riots/

Los motines y los saqueos socaban la base económica de las comunidades urbanas y minoritarias.

Las protestas pacíficas debido al asesinato por la policía de George Floyd están enteramente justificadas. Pero, los motines, el saqueo y las quemas intencionales que se han desatado en nuestras ciudades, desde Minneapolis a Dallas ciertamente no lo están. De hecho, en muchos casos, este vandalismo criminal está saboteando a las mismas comunidades minoritarias (sabotaging the same minority communities) que los manifestantes pacíficos buscan ayudar.

He aquí 10 ejemplos de reportes aparentemente interminables (seemingly endless reports) de negocios propiedad de minorías que han sufrido a manos de amotinados y saqueadores:

1. Private Stock Premium Boutique, una tienda propiedad de negros basada en Austin Texas, fue saqueada y quedó en ruinas durante los motines.

2. Bole Ethiopian Cuisine, un restaurante étnico en Saint Paul, Minnesota, fue quemado, objeto de vandalismo y destruido durante las revueltas.

3. Guns and Roses Boutique, una boutique de Dallas, que la empezó una empresaria negra, quien construyó su empresa de modas de abajo hacia arriba. Fue saqueada y dejada en ruinas durante los disturbios.

4. Go Get It Tobacco, una venta de tabacos propiedad de negros en St. Paul, Minnesota, fue vandalizada, robada y dejada hecha trizas.

5. King’s Fashion, una boutique de Philadelphia, fue quemada y convertida en una capa de cenizas.

6. MN Fashion and Jewelry, una joyería de Minneapolis, Minnesota, fue asaltada y saqueada, dejando a su dueño, Masum Siddiquee, recogiendo los pedazos.

7. Scores Sports Bar, un bar Deportivo, fue el producto de la mente de un bombero negro, quien usó los ahorros de su vida para empezarlo. Él había planeado abrirlo en junio. Los amotinados lo quemaron hasta el suelo, y los dueños no lo tenían asegurado.

8. Healing Path Wellness Services, una clínica mental de propiedad de una minoría del Sur de Minneapolis, fue quemada, saqueada y destruida.

9. Ihman’s Hair Studio, un salón de cuido del cabello de Philadelphia, fue saqueado y robado. El dueño escribió que ella está “dolida y furiosa que mi pueblo vandalizaría y destruiría un negocio propiedad de negros.”

10. Kane's Barbershop and Altatudes, una barbería propiedad de una minoría, en Austin, Texas, fue quemada durante los disturbios y extensamente dañada.

Para algunos de estos negocios concretos, donantes de GoFundMe han otorgado fuertes sumas de dinero para apoyar la reconstrucción. Sin embargo, esto es cierto tan sólo para un pequeño número de empresarios cuyas historias se hacen virales, y no hay duda de que muchos más no recibirán tal efusión de apoyo. Independientemente de si donantes generosos ayuda a negocios individuales a reconstruir, este saqueo y quema deliberada tiene ramificaciones económicas de alto alcance, que impactarán adversamente a comunidades enteras en el futuro.

El afamado economista de libre mercado, Thomas Sowell, una vez dijo que los derechos de propiedad “pertenecen legalmente a individuos, pero su función real es social, beneficiar a vastos números de personas quienes personalmente no ejercitan esos derechos.” El economista y filósofo laureado con el premio Nobel, Friedrich Hayek, formuló un punto similar, al hacer ver que “El sistema de propiedad privada es la garantía de libertad más importante, no sólo para aquellos dueños de la propiedad, sino casi tanto para aquellos que no son dueños.”

Lo que Sowell y Hayek nos tratan de decir es muy sencillo: La protección de los derechos de propiedad no sólo beneficia a los dueños de la propiedad, sino que es un pre requisito necesario para que funcione cualquier economía de mercado.

Cuando los derechos de propiedad no son seguros o son violados rutinariamente -ejemplos primordiales son el saqueo y la quema extensos- se socava la propia base de la economía de una comunidad. Entendiblemente, los inversionistas se resisten ante la incertidumbre y posponen invertir allí, en tanto que los empresarios no pueden lanzar nuevas empresas sin el conocimiento de que están seguros de su propiedad. Como resultado, se secan las oportunidades de empleo y de flujos de ingresos. Esta es una razón de porqué asegurar los derechos de propiedad es, tal vez, la función y responsabilidad más básica del gobierno.

No es una coincidencia de que hay una fuerte correlación entre la fortaleza de los derechos de propiedad en una nación determinada y sus tasas de crecimiento económico:

En un tuit del autor en https://fee.org/articles/here-are-ju...-in-the-riots/, se presenta un gráfico que muestra la protección promedio de la propiedad contra el riesgo de expropiación, 1985-95, y el logaritmo del PIB per cápita de 1995.

En el caso de estos disturbios, los costos directos y las desventajas económicas posiblemente serán sufridos desproporcionadamente por minorías. Y esto viene en momentos cuando menos se lo pueden permitir negocios pequeños propiedad de minorías, al haber sufrido extensamente bajo las cuarentenas del COVID-19 (having suffered extensively under COVID-19 lockdowns). El vandalismo esencialmente urbano y de comunidades minoritarias, ocasionará aumentos en las tarifas de los seguros y que desciendan los valores de las propiedades. Esto no es especulación ̶ es exactamente lo que sucedió después de disturbios similares a fines de la década de 1960.

Un estudio del 2005 (2005 study) encontró “efectos negativos, persistentes y económicamente significativos de los disturbios sobre el valor de las viviendas propiedad de negros” a un grado de “un 10 por ciento de declinación en el valor total de la propiedad de negros en las ciudades.”

Tampoco podemos ignorar la forma en que este comportamiento destructivo afecta no sólo a los dueños de propiedad y a empresarios, sino a todos los miembros de comunidades minoritarias, quienes también son residentes y consumidores. Un video mostrado en Fox News ofrece un ejemplo particularmente escalofriante. Una mujer negra, sacudida por la emoción, le dice al reportero que los disturbios fueron “aterradores” y describe el impacto sobre su comunidad.

“Ellos fueron directo a OfficeMax, al Dollar Store ya todo negocio de por aquí a los cuales yo voy,” dice ella en medio de lágrimas. “Ahora no tengo a dónde ir. No tengo otra forma de ir [a otros negocios] porque los buses no están operando.”

Para nada sirve toda esta destrucción. Como lo explicara el editor administrativo de la Fundación para la Educación Económica, Jon Miltimore, los disturbios en la realidad ocasiona un retroceso de las causas ante los ojos del público (sets causes back in the eyes of the public):

“Investigación nueva (New research) publicada en The Journal of Personality and Social Psychology sugiere que la popularidad de los movimientos de reforma sufre cuando los movimientos utilizan “acciones de protesta extremas,” lo cual tiende a alienar a observadores neutrales e incluso a gente que apoya una causa dada. Los líderes de los estudios condujeron seis experimentos que involucran a 3.399 participantes, para medir cómo respondía la gente a una diversidad de causas sociales, desde el movimiento Black Lives Matters hasta grupos anti aborto.

‘[Los investigadores] encontraron que comportamientos más extremos -tales como el uso de una retórica inflamatoria, el bloqueo del tráfico y el vandalismo- resultaron consistentemente en un apoyo reducido hacia los movimientos sociales,’ escribe (writes) Eric W. Dolan, fundador de PsyPost, un sitio de noticias en la red acerca de psicología y neurociencia.”

Todo esto es para decir que, si bien el saqueo y motines pueden surgir en parte de frustraciones entendibles, es desastrosamente contraproducente. No sólo ha destruido los medios de vida de muchas personas negras y de minorías propietarias de negocios, sino que, también, ha debilitado la base económica de comunidades urbanas y minoritarias.

Hacerle frente seriamente a la brutalidad e inequidades de la policía en el sistema de justicia criminal requerirá eliminar el blindaje de la responsabilidad de los malos policías, terminando mínimos obligatorios, despenalizar la marihuana (eliminating the liability shield for bad cops, ending mandatory minimums, decriminalizing marijuana), y más. Pero, el caos y el desorden sólo les ocasiona un flaco favor a comunidades minoritarias en necesidad de una reforma real.

Brad Polumbo es un periodista libertario-conservador y Compañero de Escrito Eugene S. Thorpe en la Fundación para la Educación Económica.