En los países nórdicos los medios de producción están esencialmente en manos privadas. Eso no es socialismo. Básicamente es capitalismo. Pero Sanders cree en la propiedad estatal de los medios de producción, por eso es socialista. Y no, cómo políticamente alega, a fin de no asustar a los electores, qué el está a favor del “socialismo de los países escandinavos.

LA VERDAD CONTADA POR LÍDERES ESCANDINAVOS ACERCA DEL “SOCIALISMO”

Por Anders Koskinen

Intellectual Takeout
21 de febrero del 2020


NOTA DEL TRADUCTOR: Para utilizar los ligámenes de las fuentes del artículo, entre paréntesis, subrayado y con letra en gris, si es de su interés puede verlo en https://www.intellectualtakeout.org/...navian-leaders

Dice mucho acerca del ámbito del Partido Demócrata de los Estados Unidos en el 2020, cuando la defensa del capitalismo por Michael Bloomberg se convirtió en un asunto de ofensa durante su primer debate presidencial.

“No vamos a deshacernos del capitalismo,” dijo Bloomberg (Bloomberg said). “Ya hemos tratado eso. Otros países lo intentaron. Se llamó comunismo y simplemente no funcionó.”

El senador Bernie Sanders, el autodescrito socialista, se sintió agraviado con este comentario históricamente exacto del antiguo alcalde de Nueva York. Llamándolo un “golpe bajo,” Sanders insistió en que Bloomberg se enfocara en “el socialismo democrático, no en el comunismo.”

No importa que en los años ochenta, Sander públicamente alabara (publicly praised) a la Revolución Cubana (Cuban Revolution) y a Fidel Castro. No importa que él pasara su luna de miel en la Unión Soviética, elogiando los precios de las viviendas, y que denigrara a los Estados Unidos (denigrated America) en territorio enemigo. No importa que él ensalzara al líder sandinista de Nicaragua, Daniel Ortega, un hombre acusado de crímenes contra la humanidad, no sólo durante la revolución, sino tan recientemente como el 2018 (but as recently as 2018).

No importa todo eso. Honremos el pedido de Sanders y, en vez de ello, enfoquémonos en el “socialismo democrático.”

El problema es que el modelo nórdico, al que Sanders apunta como el ideal del socialismo democrático, se ha desmoronado (has fallen apart). Suecia fue calificada como una de las 20 economías del mundo más orientadas hacia el mercado en el 2019, justamente detrás de los Estados Unidos. En efecto, la nación escandinava puede haber sido un estado inclinado hacia el socialismo en las décadas de los setentas y ochentas, pero los problemas se mantuvieron creciendo. Los empresarios fueron gravados con impuestos tales, que tuvieron que dejar el país, los trabajadores terminaron obteniendo más dinero si estaban enfermos que si trabajaran días totalmente sanos, y ahí terminaron 151 personas derivando su ingreso del gobierno, por cada 100 que se ganó su dinero trabajando en el sector privado.

Esto cambió en la década de los noventa, cuando un amplio conjunto de impuestos fue, o bien recortado dramáticamente, o eliminado en su totalidad. Se redujo el sistema asistencialista y cayeron las altas calificaciones de Suecia en cuanto a igualdad. Pero, los suecos estaban felices al tomar esa contrapartida.

Claramente Sanders necesita poner al día su conocimiento atrasado de varias décadas acerca de las economías escandinavas.

Pero, usted no necesita aceptar las palabras de publicaciones estadounidenses acerca de la concepción errada que rodea al “modelo nórdico.” Usted lo puede escuchar directamente de los propios escandinavos.

Johan Hassel es un funcionario del partido de los Social Demócratas, partido que hoy gobierna en Suecia. Él asistió a una manifestación de Sanders este año en Iowa y quedó totalmente sin impresión alguna (utterly unimpressed).

“Era como estar en una reunión del Partido de la Izquierda,” dijo Hassel, según Yahoo News. “Era una mezcla de gente muy joven con viejos marxistas, quienes piensan que todo el tiempo han estado en lo correcto. Simplemente, allí no había gente común y corriente.”

El Partido de la Izquierda, al que se refirió Hassel derogatoriamente, se llamó Partido Comunista de Suecia, desde 1921 hasta 1967, cuando se renombró Partido de la Izquierda ̶ los comunistas. La referencia comunista tan sólo fue quitada del nombre del Partido en 1990.

Incluso en el último ciclo electoral, los escandinavos estaban bombardeando a Sanders por mezclar falsamente los modelos de sus países con el socialismo.

En el 2015, el entonces Primer Ministro danés, Lars Løkke Rasmussen, dio una conferencia en la Escuela de Gobierno Kennedy de la Universidad de Harvard, en donde él, con términos nada ambiguos, desafío la idea de que su país utilizaba una economía socialista.

“Sé que alguna gente en los Estados Unidos asocia al modelo nórdico con algún tipo de socialismo. Por tanto, me gustaría aclarar una cosa, Dinamarca está lejos de ser una economía socialista planificada,” dijo Rasmussen. “Dinamarca es una economía de mercado. El modelo nórdico es un estado asistencial expandido, que brinda un alto nivel de seguridad a sus ciudadanos, pero también es una exitosa economía de mercado, con mucha libertad para proseguir sus propios sueños y vivir su vida como a usted le parezca.”

Para quedar claros, mucho del estado de bienestar que tiene Dinamarca, como lo explica Rasmussen, puede calzar en la plataforma de Sanders. Pero, en efecto, es impresionante ver una refutación tan clara de un candidato presidencial activo en la elección de un aliado.

Después, Rasmussen hizo ver que las estructuras asistenciales escandinavas emergieron durante más de 100 años y en el contexto de sociedades pequeñas, principalmente homogéneas. A pesar de lo anterior, todavía el mercado libre reina supremo en los países escandinavos.

“Tenemos un mercado laboral flexible,” dijo Rasmussen, enfatizando de nuevo el estatus de libre mercado de la economía danesa, “Las empresas puede fácilmente contratar y, tal vez, aún más importante, despedir trabajadores. Eso permite a los empleadores cambiar rápidamente y reasignar recursos.”

Rasmussen y Hassel están en lo correcto al defender a sus países de no ser cargados con la etiqueta socialista. Con el enorme recuento de muertes, del que el socialismo y su ideología hermana, el comunismo, han sido responsables en la historia mundial, casi que todos los líderes de un país querrían distanciarse de tal derramamiento de sangre.

“Nuestra libertad económica está en el nivel de Estados Unidos, y Dinamarca es un buen lugar para invertir,” dijo Rasmussen más tarde.
Es una lección que usted pensaría que Sanders para ahora ya la habría aprendido

Anders Koskinen es Editor Asociado en Intellectual Takeout. Obtuvo su BA en diciembre del 2016 en la Universidad de Minnesota, en donde se graduó en dos especialidades principales, Periodismo y Ciencia Política. Previamente escribió para Alpha News y trabajó para Guns.com como redactor.

En su tiempo libre, Anders disfruta de leer, escribir e investigar acerca del beisbol junto con la Society for American Baseball Research. Hasta el momento ha dado dos presentaciones al capítulo Halsey Hall basado en Minneapolis y sirve como su secretario. También está involucrado en un grupo de adultos jóvenes en su iglesia.