Vale la pena tener presentes estos datos cuando se nos diga que la población de osos polares está cayendo debido al cambio climático.

EL MITO DE QUE LA POBLACIÓN DE OSOS POLARES ESTÁ DECLINANDO

Por Jon Miltimore

Fundación para la Educación Económica
Lunes 9 de setiembre del 2019


NOTA DEL TRADUCTOR: Para utilizar los ligámenes de las fuentes del artículo, con letras en rojo, si es de su interés puede verlo en https://fee.org/articles/the-myth-th...-is-declining/

La historia de una población de osos polares que resurge necesita ser contada y aplaudida.

Muchos de nosotros vimos al video viral con horror. Un oso polar hambriento escarbando por comida en una tierra estéril, con sus costillas visibles bajo un abrigo blanco macilento.

“A esto es lo que se parece el cambio climático” (climate change), dijo National Geographic.

La revista explicó que, debido al derretimiento del hielo del mar, precipitado por el cambio climático, más de estos mamíferos están hambrientos. Señaló un nuevo estudio de Science que sugiere que los osos polares requieren de un mayor consumo calórico (require much greater caloric) en su dieta, que lo que se creía previamente.

El video, tomado por los fotógrafos Paul Nicklen y Cristina Mittermeier en la isla Somerset, desató la indignación ante el aniquilamiento de los osos polares por el calentamiento global.

Las imágenes las vieron 2.5 miles de millones de personas, estimó (estimated) la National Geographic. El video permanece como el más visto en el sitio en la red de la National Geographic ̶ en toda su historia.

QUÉ FUE LO QUE VINO LUEGO

Si bien muchos recuerdan las imágenes del oso polar, menos gente conoce lo que vino luego.

Como recientemente lo explicó (explained) Michele Moses en The New Yorker, científicos acusaron a National Geographic de “ser descuidada con los hechos.” No había evidencia, señalaron muchos, de que la condición del oso era resultado del cambio climático. Simplemente el oso podría haber estado viejo, enfermo o sufriendo una enfermedad degenerativa.

Mittermeier admitió ese tanto un año después.

“No puedo aseverar que este oso estaba hambriento debido al cambio climático,” escribió ella (wrote) en el National Geographic.

“Tal vez cometimos un error en no contar toda la historia ̶ que estábamos buscando una fotografía que nos revelara el futuro y no supimos de lo que le pasó a este oso en particular.”

EL OSO POLAR COMO UN SÍMBOLO

Mittermeier estaba buscando una evidencia visual del futuro que ella imaginaba, uno devastado por el cambio climático. Y encontró una ese día en un oso polar hambriento.

Como lo señala Moses en The New Yorker, los osos polares se han convertido en una “imagen indisputable del cambio climático.”

“La historia del cambio climático se ha contado, en parte, por medio de fotografías de osos polares,” escribe Moses. “Y no es de extrañar: en su hábitat helado reluciente, reflejan la belleza de otro mundo que las temperaturas al alza amenazan con destruir.”

Esa fotografía de un único oso polar hambriento posiblemente hizo más por avanzar el tema del cambio climático, que lo que podía haber logrado cualquier documento técnico o reporte del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC ). Para mala fortuna, las imágenes nos dicen relativamente poco acerca del estado verdadero de la población de osos polares.

QUÉ DICEN LOS NÚMEROS

Si bien usted encontrará no pocos encabezados en los medios que declaran que los osos polares enfrentan la extinción (face extinction), los números cuentan una historia distinta.

Datos provenientes de grupos conservacionistas y del gobierno muestran que la población de osos polares es aproximadamente cinco veces la que fue en la década de 1950 y tres o cuatro veces lo que fue en los años setenta, cuando los osos polares fueron protegidos bajo un tratado internacional.

En efecto, aún cuando los osos polares fueron protegidos por la Ley de Especies en Peligro del 2008 debido a preocupaciones de que sus cotos de caza estaban siendo reducidos por un clima que se calentaba, la población de osos polares ha sido estable durante las últimas tres décadas.

En 1984, la población de osos polares se estimó en 25.000. En el 2008, cuando se designó a los osos polares como una especie protegida, The New York Times indicó (noted ) que el número permanecía invariable: “Hay más de 25.000 osos en el Ártico, 15.000 de los cuales deambulan por el territorio de Canadá.”

Nuevas estimaciones de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) muestran una estimación (estimate) promedio de 26.500 (rango: 22.000 a 31.000) en el 2015. En el Estado del Reporte Polar del 2018 (The State of the Polar Report 2018), la zoóloga Susan J. Crockford dice que actualización de la UICN pone el nuevo punto medio global en más de 30.000.

Incluso si aceptamos la cifra menor, el estimado es el más elevado desde que el oso polar fue protegido internacionalmente en 1973.

Un cuadro de la Fundación para la Educación Económica de las Estimaciones de Población del Oso Polar, basado en fuentes del New York Times, de Covebear.com, de la Asociación Internacional del Oso, de Vida Silvestre Internacional, del UICN y del Grupo de Estudio del Oso Polar, se halla en https://fee.org/articles/the-myth-th...-is-declining/

La salud de la población del oso polar contraviene las predicciones (predictions ) de académicos quienes han dicho que dos tercios de los osos polares desaparecerá en las próximas décadas debido a temperaturas más calientes y al derretimiento del hielo en el mar del Ártico.

Las buenas noticias de que los osos polares están prosperando es poco posible que atraiga tanta atención, como las imágenes de un oso polar hambriento que escarba por alimentos en la isla Somerset. A pesar de ello, la historia de una población de osos polares que resurge necesita ser contada y aplaudida.

Jonathan Miltimore es editor administrativo de la FEE.org. Sus reportajes y artículos han aparecido en la revista TIME, el Wall Street Journal, CNN, Forbes, Fox News y el Washington Times.