Un episodio histórico en la lucha contra los impuestos, sobre el cual posiblemente muchos no teníamos conocimiento previo.

LA REVUELTA DE CAMPESINOS DE 1381: UN ACONTECIMIENTO EXTRAORDINARIO DE REVUELTA CONTRA IMPUESTOS

Por Lawrence W. Reed

Fundación para la Educación Económica
Jueves 30 de mayo del 2019


NOTA DEL TRADUCTOR: Para utilizar los ligámenes de las fuentes del artículo, entre paréntesis, con letra subrayada, si es de su interés puede verlo en https://fee.org/articles/the-peasant...-a-tax-revolt/

El principal líder de la revuelta que empezó el 30 de mayo de 1381, fue un hombre llamado Wat Tyler, considerado por muchos historiadores como el primer revolucionario de la historia de Inglaterra.

Al menos tan atrás como el antiguo Egipto, cuando escribas entrometidos inspeccionaban las cocinas de los hogares, para asegurarse que estaban pagando el impuesto sobre el aceite para cocinar, tanto los impuestos como la ciudadanía se habían alzado en efervescencia. Una ocasión en particular se merece hoy una mención, pues el 30 de mayo es el aniversario de una revuelta verdaderamente extraordinaria en Inglaterra, conocida como la Revuelta de los Campesinos de 1831.

LA REVUELTA DE LOS CONTRIBUYENTES

La historia se repite más de un siglo y medio después de la guerra y de impuestos para pagar por ella, que condujeron a Carta Magna (led to the Magna Carta in 1215). Esta vez, los responsables inmediatos fueron las monarquías francesa e inglesa, las cuales emprendieron la infructífera “Guerra de los Cien Años.” Usted tan solo puede imaginar la enorme facture impositiva, si su guerra todavía rugiera un siglo después de que empezó.

La severidad de la reacción de la gente constituye un testimonio impactante de su desprecio por los altos impuestos y por recaudadores de impuestos brutales y arrogantes. En la intensa, pero poco duradera, Revuelta de los Campesinos, turbas furiosas capturaron a empleados y jueces encargados de aplicar las leyes tributarias y desfilaron con sus cabezas en picas, sin el resto de sus cuerpos, por las calles de los pueblos ingleses. Las cárceles y los edificios en donde se almacenaban los registros de impuestos fueron asaltadas y, a menudo, destruidos, con todo y los registros.

Grandes números de burócratas tributarios fueron asesinados en formas a menudo creativas. Debido a que el arzobispo de Canterbury simpatizaba con los recaudadores de impuestos, él también fue despachado como recompensa, mucho más antes de lo que alguna vez él habría pensado. Incluso el rey Ricardo II, un muchacho de apenas 14 años, temió tanto por su vida, que rápidamente les otorgó a los manifestantes enormes concesiones. Incluso los rebeldes reunieron un ejército, que asaltó a la capital, se apoderó de la Torre de Londres y mató a dos funcionarios de alto rango en las finanzas, el Lord Canciller y el Lord Tesorero Mayor. Antes que todo terminara, los números de muertos en ambos bandos llegaron a los miles.

MONTHY PYTHON Y LA VIDA EN EL SIGLO XV

Esto fue en el siglo XIV, una época espantosa para estar vivo. Si en 1381 usted tenía 40 años de edad, era un anciano. Usted nunca conocería un día en que Inglaterra no estuviera en guerra. Usted recordaría crecer en la secuela de la Muerte Negra, la plaga indescriptible que mató a la mitad de la población del país, empezando a inicios de fines de la década de 1340. Muy posiblemente usted sería un siervo (Este panorama sombrío me recuerda un momento de humor de Monty Python (a humorous Monty Python moment)), [Nota del traductor: Monty Python fue un grupo de humoristas británico].

Ese video puede encontrarse en https://fee.org/articles/the-peasant...-a-tax-revolt/

De regreso al 1215, la Carta Magna puede hacer liberado un poco a la nobleza, pero, las “libertades inglesas” más amplias no eran todavía una realidad para las llamadas “masas.”

Un impopular impuesto per cápita mostró ser la chispa del levantamiento violento de 1381. Su primera versión, introducida en 1379, y ligeramente revisada posteriormente, impuso un impuesto universal de cuatro peniques por persona mayor de 14 años. El Parlamento subcontrató su recaudación con agentes privados a los que les pagaba una comisión, y no le importó qué tácticas emplearan esos empleados, siempre y cuando obtuvieran el dinero. Era un esquema malévolo para maximizar las recaudaciones, al combinarse la rapacidad del gobierno con la eficiencia del sector privado. A pesar de lo mala que es hoy la Oficina Federal de Impuestos de los Estados Unidos, sólo imagínese qué cosas sucederían, si se contratara a la MS-13 [Mara Salvatrucha] para que le auditara a usted.

WAT TYLER, EL LÍDER REBELDE

El principal líder de la revuelta que empezó el 30 de mayo de 1381, fue un hombre llamado Wat Tyler, considerado por muchos historiadores como el primer revolucionario de la historia de Inglaterra. En su libro The Life and Legend of a Rebel Leader: Wat Tyler, el autor Stephen Basdeo señala que, cuatro siglos después de la revuelta, nada menos que Thomas Payne de los Estados Unidos, pagó tributo a Tyler, llamándolo “un héroe y un luchador por la libertad… merecedor de un monumento en su honor por su contribución al avance de la libertad.”

No se conoce mucho de la vida temprana de Tyler, pero, por lo que sabemos de su agitado último año, me pone a pensar de él como una combinación del campesino que toca el banjo en el porche en la película Deliverance, con el tierno lechoncillo John Belushi en Animal House y del incendiario Patrick Henry.

Para crédito suyo, él tenía una agenda para el momento en que obligó al joven Rey Ricardo II a ir a la mesa de negociaciones. Tyler no sólo demandó una reducción dramática de impuestos, sino, también, la cesación del aventurerismo costoso de Inglaterra en el extranjero, la abolición de los controles a los salarios impuestos sobre el campesinado, la eliminación de muchos privilegios especiales para la nobleza y el fin de la servidumbre, como tal.

Puede haber sido el lado de Deliverance/Animal House de Tyler lo que condenó a su causa. La reunión con el Rey Ricardo no salió tan bien. Al principio, el rey concedió la mayoría de las demandas de Tyler, pero, luego, el rudo leñador se sintió en libertad. Testigos dicen que pidió agua para beber y luego, rudamente, se enjuagó la boca y botó el agua a pulgadas de distancia de la cara del rey. Uno de los sirvientes del rey objetó e insultó a Tyler, quien, entonces, atacó al sirviente. Cuando intervino el Burgomaestre de Londres e intentó detener a Wat, Tyler sacó su espada y atacó al alcalde. De ahí en adelante, todo fue cuesta abajo, terminando rápidamente con la decapitación pública de Tyler. Ausente su líder, la revuelta se disipó.

De inmediato, el Rey Ricardo demostró qué tan irresponsable puede ser alguien de 14 años cuando tiene las llaves del carro ̶ o del reino, en este caso. Revocó todas las concesiones que le había otorgado a Tyler y emitió órdenes de arresto y muerte de aquellos involucrados en la revuelta. Para los manifestantes contra los impuestos, fue un regreso al status previo a la lucha. La libertad tendría que esperar por otro día.
Todo acontecimiento histórico significativo ofrece lecciones que han de ser aprendidas. Con toda seguridad, una de la Revuelta de los Campesino de 1831 es esta: cuando se está a punto de ganar, pórtese bien.

Lawrence W. Reed es presidente emérito y compañero senior Familia Humphreys de la Foundation for Economic Education y autor de los libros Real Heroes: Incredible True Stories of Courage, Character, and Conviction y Excuse Me, Professor: Challenging the Myths of Progressivism.