¿Y QUIÉN VA A PAGAR POR ESTO?

Por Jorge Corrales Quesada

Ya lo sé. Habrá quien piense que esta es una pregunta estúpida. Pero, me parece conveniente enfatizar que será usted, que seré yo y que seremos todos los contribuyentes al sistema de la Caja del Seguro Social, quienes tendremos que pagar por las pérdidas provocadas por la huelga reciente en esa entidad. Y no es poca cosa: estimaciones preliminares hechas por ese ente indican que, al momento en que se dio a conocer a los ciudadanos, la pérdida será, como mínimo, de ¢12.000 millones.

La información proviene de un artículo de La Nación del 21 de octubre, titulado “Huelga costó a la Caja al menos ¢12.000 millones,” pero creo que es un título verdadero a medias, pues, en realidad, es un costo que nos fue ocasionado a todos los costarricenses por un grupo de huelguistas en días anteriores (estimación de la huelga que duró del 10 de setiembre al 10 de octubre).

Pero, quedemos claros: esas son estimaciones preliminares pues, según lo señaló al medio la Gerencia Médica de la entidad, dicha información tiene que ajustarse por “el dato de los funcionarios participantes en la huelga y con los requerimientos de las diferentes unidades de la Caja para mitigar las secuelas de la protesta de los servidores.” Aquella estimación de ¢12.000 millones “incluye los pagos de horas extra y la contratación de personal adicional”, así como “la compra de servicios de lavandería y nutrición” y lo que la Caja denomina “oportunidades perdidas,” que es “el valor de las consultas y cirugías programadas y que no se pudieron realizar.”

Según la Caja, el total de citas perdidas fue de 129.935, de las cuales 80.949 eran con médicos generales, 40.567 con médicos especialistas y 8.000 con otro personal como trabajadores sociales, psicólogos y nutricionistas. Hasta el 10 de octubre se habían perdido 3.706 operaciones y se estimó que podrían ascender a 4.000. Gracias al Expediente Digital Único de Salud se atendió a enfermos en los hospitales. Así, las citas perdidas no fueron lo elevadas que podrían haber sido sin ese instrumento de control.

Aquellos datos de costos en que incurrimos los costarricenses por esa huelga en la Caja, obviamente no miden los costos que personalmente experimentaron, incluso en el control de su salud, todos aquellos que no tuvieron los servicios normales de la Caja, costos que van desde adquirir servicios médicos fuera de la Caja, pedir permisos en los trabajos para ir a la nueva oportunidad de cita que se les dio, costos de transportarse a los hospitales y llegar darse cuenta de que no los atenderían, teniendo que volver luego a recibir el servicio, e incluso por dolores que muchos sufrieron durante esa espera del cuido necesario y no me atrevo a pensar que, por la huelga, hasta muertes pueden haberse dado, al no tenerse el servicio de pleno funcionamiento de la Caja.

Por eso, aquella pregunta “estúpida” me permitió hacer ver la ausencia de misericordia ante el dolor ajeno que exhiben ciertos huelguistas insensatos, además del costo pecuniario para la Caja; esto es, para los contribuyentes, quienes siempre son los que terminamos pagando esas injusticias.

Publicado en el sitio de ASOJOD, en los blogs del Instituto Libertad y de PuroPeriodismo, así como en mis sitios en Facebook, jorge corrales quesada y Jcorralesq Libertad, el 4 de diciembre del 2018.