Una buena explicación de la diferencia que hay entre el concepto de pobreza y el tema de la desigualdad en la distribución de ingresos en una sociedad

LA ONU SE EQUIVOCA TOTALMENTE EN CUANTO A LA POBREZA

Por Tim Worstall

Fundación para la Educación Económica
Viernes 31 de agosto del 2018


NOTA DEL TRADUCTOR: Para utilizar los ligámenes de las fuentes del artículo, entre paréntesis, con letra en roja y subrayada, si es de su interés puede verlo en https://fee.org/articles/what-the-un...about-poverty/

Desigualdad no es pobreza y pobreza no es desigualdad.

Philip Alston, el Relator Especial de las Naciones Unidas (ONU) acerca de la pobreza extrema, pronto viene al Reino Unido (coming to the UK soon) para contarnos que tan vilmente tratamos a los menos afortunados en nuestra sociedad.

Él tiene antecedentes en estos asuntos, tal como lo mostró en su reporte acerca de la pobreza en los Estados Unidos (report on poverty in the US). En su reporte inicial, él trató de medir la pobreza sin tomar en cuenta todas las cosas que el gobierno de los Estados Unidos hace para reducirla, lo cual realmente no es la forma de medirla. Su siguiente estocada cometió un error diferente ̶ del todo no intentó medir la pobreza, sino que midió la desigualdad.

Sin duda alguna que la desigualdad es una cosa interesante, pero es importante que ambos conceptos no se confundan. La desigualdad no es pobreza y la pobreza no es desigualdad.

EMPECEMOS POR DEFINIR LOS TÉRMINOS

En este momento es mejor que señalemos lo que es pobreza. En un nivel global, el Banco Mundial define a la pobreza absoluta cuando se está viviendo con menos de $1.90 al día. Ese no es ingreso efectivo, sino el valor de todo el consumo, incluyendo vivienda, el cuidado médico que usted no recibe, y toda la pensión que usted no haya recolectado. También eso es medido en precios de los Estados Unidos ̶ imagínese tratar de comprar todo lo que requiere en toda su vida en Walmart con $1.90 al día por persona.

Este tipo de pobreza en la actualidad no existe en el Reino Unido. Barbara Castle, entre toda la gente, señaló eso en 1959; hemos conquistado las necesidades y deseos esenciales. Casi que no hay nadie, dejando de lado una adicción importante o problemas mentales no tratados, con ese nivel de ingreso o estándar de vida.

De lo que todos actualmente están hablando es de pobreza relativa, viviendo con menos de un 60 por ciento de la mediana del ingreso familiar (ajustado por el tamaño de la familia). Pero, esto es una medida de desigualdad, no de pobreza. A pesar de tener este problema obvio, esa es la medida que el Relator de la ONU estará usando. Él tendrá que hacerlo, dado que hay por investigar tan poco de aquella verdadera pobreza extrema. Tampoco la medida elegida por el señor Alston iluminará acerca de si los estándares de vida están mejorando o no.

LA POBREZA ABSOLUTA DESAPARECIÓ Y LA POBREZA “ABSOLUTA” SE HA REDUCIDO A LA MITAD

Nosotros también tenemos una versión codificada de la medición de la pobreza absoluta en el Reino Unido en donde adoptamos ese 60 por ciento, pero lo fijamos para un año determinado y luego vemos cómo le va la gente durante décadas en comparación con aquel ingreso determinado.

Este tipo de pobreza “absoluta” se ha reducido a la mitad durante las últimas dos décadas (halved over the past two decades). Esto significa que los estándares de vida de los británicos más pobres definitivamente han mejorado ̶ normalmente no es algo que se nos cuenta.

En vez de ello, se nos dice que está creciendo el aumento de centros de alimentación para pobres, mientras que la verdad es que los centros de alimentación alivian la pobreza ̶ entre más centros hay, mayor es el alivio de la pobreza, lo cual es la razón de ser de ellos. El problema subyacente que lleva a la gente a los centros de alimentación es la incapacidad del gobierno de pagar los beneficios a tiempo, lo cual no es un problema nuevo como lo sabe cualquiera que alguna vez haya interactuado con versiones anteriores del estado de bienestar.

Tal como lo sugiere la lista del periódico The Guardian, la industria de la alimentación se pone en fila para decirnos qué tan terrible es todo esto. Una de tales historias (One such story) nos dice que,

“… él está viviendo con £95.35 por quincena en pagos de ayuda universal y, después de pagar por su electricidad y el gas, combustible para su carro adaptado, conexión de banda ancha, la televisión por cable y leche para bebé para su hijo más joven, le quedan £10.50 para las dos semanas.”

Esto, por supuesto que no es cierto. Alguien, en algún lugar, está pagando por el alquiler. Y, en el tanto que tiene al menos dos hijos pequeños, habría al menos otras £70 por quincena del programa de beneficios por niños que no está incluido en la ayuda universal.

SER POBRE ES DISTINTO DE POBREZA ABSOLUTA

Pero, piense acerca de lo que aquí esta siendo descrito como pobreza. Si bien claramente no es pudiente, este caballero vive en una casa, con un carro, con internet, que cubre cocinar y calefacción, con alrededor de £80 por quincena para cubrir su otro gasto importante, la alimentación. El presupuesto promedio en alimentación para una familia británica es de £55 por semana. Ciertamente, le queda un poco menos que eso, pero, aun así, ni siquiera ello es pobreza y mucho menos pobreza extrema.

En la realidad, aun si tomamos tan sólo el pago por ayuda universal y no incluimos todas las otras cosas que le son pagadas (alquiler, cuido de la salud, contribuciones para la pensión, la educación de los hijos, etcétera), él globalmente todavía tiene un ingreso del 30 por ciento más alto, incluso después de que lo ajustemos por los precios del Reino Unido.

Casualmente, en la realidad tuve un intercambio epistolar con Alston acerca de su reporte acerca de los Estados Unidos, cuando este vio la luz, señalando mucho de lo indicado en párrafos previos.

Su respuesta fue que “no existe un acuerdo claro acerca de qué índice utilizar” para medir la pobreza. A lo cual uno puede responder que, si tal es el caso, entonces, deberíamos ser muy reservados antes de formular pronunciamientos arrolladores acerca de la pobreza en cualquier país del mundo del cual hablemos.

O bien, uno puede señalar que la desigualdad -que algunos tienen más que otros- es, en efecto, muy diferente de la pobreza, en donde algunos casi no tienen nada. Ciertamente, el Reino Unido no tiene casi nada de esto último. ¿Es eso realmente tan difícil de entender?

Reimpreso de CapX.

Tim Worstall es miembro del Instituto Adam Smith de Londres.