ACASO CREYÓ QUE ERA GRATUITO

Por Jorge Corrales Quesada

Si pensó alguna vez que las labores de fiscalización de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) no tenían costo alguno para usted, posiblemente estaba muy equivocado. De hecho esa labor se nos cobra indirectamente, pues la ARESEP obtiene sus recursos mediante un canon cobrado a los entes que regula y, a su vez, ellos nos lo pasan como parte de las tarifas que se cobran por sus servicios. En síntesis, usted termina pagando las labores de fiscalización de ARESEP en las tarifas de diversas formas de transportes, combustibles, agua, electricidad, puertos, correos, carga ferroviaria y peajes.

Según un comentario en La Nación del 1 de mayo, con el titular “Pleitos perdidos por ARESEP suben carga sobre tarifas: Canon que pagan empresas reguladas aumentó en 10% para afrontar indemnizaciones,” ese cobro por regulación -el ingreso más importante de la ARESEP- “ascendió a ₡ 16.983 millones: 10.6% adicional respecto al 2016, cuando alcanzó los ₡15.354 millones.”

Pero, una gran parte de los ingresos de ARESEP se destinó a pagar indemnizaciones por condenas sufridas en tribunales. Ante tal circunstancia legal, ARESEP empezó desde el 2015 a hacer una reserva especial llamada “fondo de provisiones para litigios y demandas.” Eso permitió que, en el 2016 y el 2017, la ARESEP pagara ₡4.313 millones por compensaciones derivadas de perder juicios y para el 2018 se estima que destinará otros ₡2.954 millones por “casos que están en trámite.”

El tema se las trae al preguntarse uno por qué se podrían perder tales juicios, si es por un comportamiento impropio de la ARESEP, o bien por malos procedimientos de cálculos de tarifas, o porque no tiene buenos abogados o a que, podría ser, es una forma de devolver fondos a quienes supuestamente han pagado una supervisión que juzgan excesiva (a los regulados). En todo caso, esa devolución debería reflejarse, lo que asumo, en los cobros a las tarifas de los consumidores, quienes conceptualmente sólo “perderían” el diferencial (más los intereses) entre lo pagado al inicio de más, de forma indirecta, por los cánones impuestos por ARESEP, y el monto de compensación que los tribunales han determinado en sus juicios.

Por todo lado, los consumidores terminamos pagando el costo del gobierno: ¿acaso pensó que el gobierno nos salía gratis?

Publicado en mis sitios de Facebook jorge corrales q y Jcorralesq Libertad, el 7 de junio del 2018.