Para ponerse a pensar...

POR QUÉ LA POLÍTICA ES “RACIONALMENTE IRRACIONAL”

Por Donald J. Boudreaux
Fundación para la Educación Económica
Lunes 21 de mayo del 2018


Mantener una creencia política generalmente no tiene costo material para el individuo que la sostiene.

La Cita del Día proviene de la página 132 del destacado volumen de mi colega Bryan Caplan, titulado The Myth of the Rational Voter (el énfasis es del original):

“Dado que las creencias políticas ilusorias son gratuitas, el votante las consume hasta llegar al “punto de la saciedad,” creyendo todo aquello que le hace sentirse mejor. Cuando una persona se pone el sombrero de votante, no tiene que desistir de la eficacia práctica a cambio de la imagen propia, pues, en primer lugar, no tiene eficacia práctica alguna que ceder a cambio.”

Mantener una creencia política generalmente no tiene costo material para el individuo que la sostiene. Sus propias acciones, por sí mismas, nunca determinarán el resultado de cualquier elección política y ejercerán un efecto sobre las normas de la sociedad que es imperceptible para él o ella. De forma que el profesor asistente, que se siente bien acerca de sí mismo, porque apoya la legislación de salarios mínimos como medio para reducir la desigualdad, o el jubilado, que está convencido de que una abundancia mayor de importaciones significa menor prosperidad para la gente de su país, pueden continuar apegados a esa creencia, sin tener vez alguna que pagar personalmente un precio verdadero por mantener y apegarse a ella. Esta realidad, por supuesto, es verdad para todas las creencias, ya sean aquellas que usted considera como sensatas o aquellas que usted juzga son totalmente descabelladas.

La política -al desacoplar plenamente el mantenimiento de creencias particulares de las consecuencias verdaderas de poner tales creencias en acción- es una fuente de lo que Bryan Caplan llama correctamente “irracionalidad racional.”

Reimpreso de Cafe Hayek.

Donald Boudreaux es compañero sénior del Programa F. A. Hayek de Estudios Avanzados en Filosofía, Política y Economía del Mercatus Center de la Universidad George Mason; es miembro de la Junta Directiva del Mercatus Center, profesor de Economía y ex director del departamento de economía de la Universidad George Mason y ex presidente de la Foundation for Economic Education.