2011-11-01-JUEGOS DE NÚMEROS

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JUEGOS DE NÚMEROS

La Extra, 01 de noviembre del 2011.

Es útil observar cómo las autoridades gubernamentales con frecuencia juegan con los números para mostrar alguna cosa que favorezca sus intereses, sin decir, como una vez lo dijo don Oscar Barahona, “la verdad, verdadera”.

Hace poco escuché en la radio un excelente comentario de un economista, quien por cierto se había alejado de los medios, don Odalier Villalobos, el cual fungió en el pasado como Vice Ministro de Economía, y es un conocedor del ambiente empresarial costarricense. Sin que para mi sea importante que su partidarismo político fuera en cierto momento con Liberación Nacional, tal vez este atributo podría servir para que se le escuche seriamente en este gobierno.

Tal como hace poco lo expuso Juan Carlos Hidalgo del Instituto Cato y este servidor desde hace muchos años, la carga tributaria que suele usar el gobierno y ad láteres como justificación –no sé por qué razón- para proponer su aumento, es de cerca de un 14 o un 15% de nuestro PIB. Si se incorporan en su medición factores cruciales, tales como sobreprecios de ciertos bienes no transados del Estado, como electricidad, gasolina, multas con claro propósito fiscal, entre otros y sobre todo las llamadas cargas sociales, que claramente son impuestos sobre los salarios, al menos tal como lo hace la OECDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), la llamada carga tributaria del país se aproximaría al 25%. Esta carga está lejos de ser baja como suelen alegar los proponentes de mayores impuestos. Por el contrario, podría considerarse que está por encima del promedio de las naciones de ingresos medios. Lo que le interesa al gobierno es jugar con los números.

Igual hace cuando menciona que el impuesto que propone a los vehículos de lujo será para carros con un valor mayor a $18.000, pero oculta el hecho de que esos carros cuestan menos de la mitad en sus mercados de origen y que ese valor que los convierte en “lujos” se debe a que hoy ya tiene un impuesto a la importación mayor al 100%.

Podrían poner un impuesto a las carretas de tal vez un 10.000%, lo cual también las convertiría en vehículos de lujo y así hacer que paguen ese impuesto mayor que hoy se propone con el paquetazo. El gobierno sigue jugando con los números.

Ya el Estado prepara una costosísima campaña nacional en favor de los mayores impuestos. Por supuesto no tiene problemas de financiamiento para dicha campaña: se trata de tomarlo de sus bolsillos y de los míos; de los de todos los ciudadanos. Ante ese ejemplo de “moderación” en el gasto que nos da este gobierno, tan sólo superado por el desprecio que se tiene de quienes somos los que en verdad pagamos por él, no me queda más que reclamar: si jugar con los números no es suficiente, es aún más despreciable que un gobierno juegue con lo que tanto trabajo nos cuesta ganar y que nos lo quita con impuestos.