Mostrar Feed RSS

Boletín ANFE

09-04 Empujón del FMI al central

Calificar esta Entrada
Este artículo fue publicado en el Boletín de ANFE de Abril del 2009

09-04 EMPUJÓN DEL FMI AL CENTRAL

Luis E. Loría *


“No sabemos cuán largo es el desierto. Lo que queremos es tener agua en las cantimploras”, declaró Francisco de Paula Gutiérrez, Presidente del Banco Central de Costa Rica (BCCR), al celebrar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) (La Nación 14/04/09). Los recursos del FMI, en caso de que se lleguen a utilizar, son un tipo de deuda pública que no requiere aprobación por parte de la Asamblea Legislativa. Ese dinero sería administrado por el BCCR a discreción, sin rendir cuentas a nadie, como es su costumbre.

Lo paradójico del asunto es que los costarricenses, quienes hemos sufrido (o muerto) debido a las inclemencias del desierto económico, al cual nos condujo el mismo ente emisor, pagaremos al FMI el recibo del agua, por $735 millones, que le echará en las cantimploras al BCCR para que continúe haciendo de las suyas.

El empujón que el FMI le da al Central no nos ayudará a salir de la crisis. Repasemos, brevemente, lo que se conoce de los compromisos voluntarios adquiridos por los encargados de las políticas económicas en Costa Rica con el FMI. Primero, en política fiscal, no hay nada nuevo. Afortunadamente, las autoridades no se comprometieron a impulsar un paquetazo de nuevos impuestos. Segundo, en política monetaria, se habla de una supuesta “disciplina monetaria” para mantener bajo control la cantidad de dinero en manos de las personas y evitar que “compren en exceso”—lo que sea que eso signifique—tanto en el mercado interno como en el mercado externo.

A contravía. Esto es precisamente lo contrario a lo que J.M. Keynes recomendó en su Teoría General, en el capítulo 22—Notas sobre el ciclo comercial.

“El remedio estaría en varias medidas diseñadas para incrementar la propensión a consumir a través de la redistribución del ingreso o de otros medios; para que un nivel determinado de empleo requiera un menor volumen de inversión corriente para soportarlo”, explicó.

En otras palabras, para mantener el empleo actual, en momentos de crisis, es fundamental inyectar liquidez al sistema económico para dinamizar el consumo. Si la política monetaria saca dinero de la economía, las ventas caerán y, como resultado, aumentará el desempleo y las empresas quebrarán.

Tercero, en política cambiaria, se habla de moverse hacia una mayor flexibilidad, para que el precio del dólar tenga mayor libertad para variar. Esto no hace sentido en un mercado cambiario ineficiente donde el tipo de cambio es manipulado, grandes jugadores se benefician del acceso a información privilegiada y el BCCR se ha convertido en el principal expoliador legal. En realidad, se trata de una mayor libertad para especular y aumentar las abominables ganancias cambiarias del BCCR y de quienes se benefician de ese negocio, en perjuicio del resto de los ciudadanos. Adicionalmente, el sistema de bandas cambiarias es responsable por graves pérdidas de competitividad en las exportaciones y de introducir incertidumbre al sistema económico, lo cual ahuyenta la inversión, tanto nacional como extranjera.

Cuarto, en política financiera, se dice que procura el fortalecimiento del sistema financiero.
Nuevamente, se presenta una contradicción ya que las políticas del BCCR y Hacienda han contribuido a elevar las tasas de interés y al deterioro de las carteras de crédito.

También, causa de las muertes en el desierto. También fue la Junta Directiva del Central la que hace un año jugó con las tasas de interés y engañó a individuos y empresas para que contrajeran créditos artificialmente baratos que hoy no pueden cancelar.

Al respecto, el mismo Keynes sentenció: “Por tanto, un incremento en la tasa de interés, como remedio para una situación que sale de un periodo anormal de pesada nueva inversión, pertenece a la especie de remedio que cura la enfermedad matando el paciente.”

El empujón del FMI al Central no es motivo de celebración. Las cantimploras del Central se llenarán de agua mientras que el FMI y el Gobierno observan pasivos cómo trabajadores y empresas costarricenses continúan muriendo de sed en el desierto.

*Economista, consultor (lloria@strategic-la.com). Tomado de Diario La Extra del 21 de abril del 2009

Enviar "09-04 Empujón del FMI al central" a Digg Enviar "09-04 Empujón del FMI al central" a del.icio.us Enviar "09-04 Empujón del FMI al central" a StumbleUpon Enviar "09-04 Empujón del FMI al central" a Google

Etiquetas: luis e. loría Agregar / Editar Etiquetas
Categorías
Sin Categoría

Comentarios