Jorge Corrales Quesada
23/01/2016, 13:03
EL ESTADO INEFICIENTE-¿DESDE CUÁNDO ES ASÍ?
Por Jorge Corrales Quesada
En La Nación del 25 de agosto aparece una noticia realmente importante, no sólo para el bolsillo de los costarricenses, sino también para la conciencias de tanto ciudadano molesto con los abusos del estado. El titular lo dice todo: “ARESEP rechazó a RECOPE lista de gastos por ₡20.000 millones: Cálculo de tarifas.”
De acuerdo con el periódico, “se trata de ₡20.363 millones que la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos (ARESEP) no le reconocerá a la Refinadora por considerar que no tienen ninguna relación con la prestación del servicio.” Se trata de plata que se nos pretendía cobrar, mediante precios más altos de los combustibles, para ser usado en todo tipo de gastos de la burocracia de “la refinadora que no refina”. Entre esos gastos se señalan el pago de servicios de restaurantes, útiles y materiales que se usarían en recepciones, becas para los hijos de los funcionarios de RECOPE, además de “₡5.000 millones del fondo de ahorro, préstamos, vivienda, recreación y garantía que contempla la convención colectiva” los que habrían estado siendo pagados por todos nosotros. También, indica el comentario, comprende plata “para la administración de ese fondo y otros beneficios de la convención colectiva.” Todo un festín a costa de los consumidores de combustibles.
Pero la cosa no se queda aquí: entre otros gastos que se rechazan están ₡9.000 millones que iban “para la Gerencia de Refinación [responsable de la no refinación, me imagino] y gastos de inversión por atrasos en proyectos.” Es decir, esto último es que hasta los costos de la incapacidad de esa institución para llevar a cabo sus proyectos en el tiempo debido, se nos pretendía cargar a los precios que todos debemos pagar por los combustibles.
El anhelo del monopolio no se quedó allí: también para la solicitud de RECOPE de aumentar los precios de los combustibles, estimaron una inflación de 4% en ciertos gastos, el cual la ARESEP lo redujo a 2,05% (vivillos de RECOPE) y también sucedió lo mismo en cuanto al tipo de cambio promedio usado en su estimación: se redujo de ₡549,46 a ₡540,72 (vivazos los de RECOPE). Asimismo, se rechazó una solicitud de “la refinadora que no refina” para que se trasladara a los precios de los combustibles una partida por “las líneas de crédito que usa para la compra de los combustibles, así como los costos relacionados con la refinería por ₡8.565 millones.”
Lamentablemente el medio periodístico no abunda en cuanto al sentido de esas dos últimas partidas, pero no huelen bien, como para ser cargadas a lo que los consumidores pagamos por los combustibles.
¡Qué bueno que este paronazo que le dio ARESEP a RECOPE se haya traducido en sólo un aumento de ₡3 a las gasolinas súper y regular en vez de los ₡9 y ₡8 que pretendían para cada una de ellas! Pero aquí viene la pregunta: ¿En el pasado sí se consideró y aceptó de parte de ARESEP este tipo de gastos que realiza RECOPE y que nos habría sido pasado en precios mayores por los combustibles que pagamos los consumidores? Ni siquiera concibo que haya sido así de descarado el traslado de la ineficiencia y el dispendio y los privilegios laborales y el abuso de RECOPE a nosotros los consumidores. En buena hora que se les ponga un alto que debió de haberse dado desde hace mucho rato, pero, de haber sido así, al menos en la conciencia de ciertas gentes ha de descansar la ingratitud de habérsenos trasladado a los consumidores cautivos del monopolio toda esa serie de gastos indebidos, impropios y voraces.
Publicado en mis sitios en Facebook el 27 de enero del 2016.
Por Jorge Corrales Quesada
En La Nación del 25 de agosto aparece una noticia realmente importante, no sólo para el bolsillo de los costarricenses, sino también para la conciencias de tanto ciudadano molesto con los abusos del estado. El titular lo dice todo: “ARESEP rechazó a RECOPE lista de gastos por ₡20.000 millones: Cálculo de tarifas.”
De acuerdo con el periódico, “se trata de ₡20.363 millones que la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos (ARESEP) no le reconocerá a la Refinadora por considerar que no tienen ninguna relación con la prestación del servicio.” Se trata de plata que se nos pretendía cobrar, mediante precios más altos de los combustibles, para ser usado en todo tipo de gastos de la burocracia de “la refinadora que no refina”. Entre esos gastos se señalan el pago de servicios de restaurantes, útiles y materiales que se usarían en recepciones, becas para los hijos de los funcionarios de RECOPE, además de “₡5.000 millones del fondo de ahorro, préstamos, vivienda, recreación y garantía que contempla la convención colectiva” los que habrían estado siendo pagados por todos nosotros. También, indica el comentario, comprende plata “para la administración de ese fondo y otros beneficios de la convención colectiva.” Todo un festín a costa de los consumidores de combustibles.
Pero la cosa no se queda aquí: entre otros gastos que se rechazan están ₡9.000 millones que iban “para la Gerencia de Refinación [responsable de la no refinación, me imagino] y gastos de inversión por atrasos en proyectos.” Es decir, esto último es que hasta los costos de la incapacidad de esa institución para llevar a cabo sus proyectos en el tiempo debido, se nos pretendía cargar a los precios que todos debemos pagar por los combustibles.
El anhelo del monopolio no se quedó allí: también para la solicitud de RECOPE de aumentar los precios de los combustibles, estimaron una inflación de 4% en ciertos gastos, el cual la ARESEP lo redujo a 2,05% (vivillos de RECOPE) y también sucedió lo mismo en cuanto al tipo de cambio promedio usado en su estimación: se redujo de ₡549,46 a ₡540,72 (vivazos los de RECOPE). Asimismo, se rechazó una solicitud de “la refinadora que no refina” para que se trasladara a los precios de los combustibles una partida por “las líneas de crédito que usa para la compra de los combustibles, así como los costos relacionados con la refinería por ₡8.565 millones.”
Lamentablemente el medio periodístico no abunda en cuanto al sentido de esas dos últimas partidas, pero no huelen bien, como para ser cargadas a lo que los consumidores pagamos por los combustibles.
¡Qué bueno que este paronazo que le dio ARESEP a RECOPE se haya traducido en sólo un aumento de ₡3 a las gasolinas súper y regular en vez de los ₡9 y ₡8 que pretendían para cada una de ellas! Pero aquí viene la pregunta: ¿En el pasado sí se consideró y aceptó de parte de ARESEP este tipo de gastos que realiza RECOPE y que nos habría sido pasado en precios mayores por los combustibles que pagamos los consumidores? Ni siquiera concibo que haya sido así de descarado el traslado de la ineficiencia y el dispendio y los privilegios laborales y el abuso de RECOPE a nosotros los consumidores. En buena hora que se les ponga un alto que debió de haberse dado desde hace mucho rato, pero, de haber sido así, al menos en la conciencia de ciertas gentes ha de descansar la ingratitud de habérsenos trasladado a los consumidores cautivos del monopolio toda esa serie de gastos indebidos, impropios y voraces.
Publicado en mis sitios en Facebook el 27 de enero del 2016.