Jorge Corrales Quesada
24/09/2015, 08:39
EL ESTADO INEFICIENTE-EL ABANDONO EN NUESTROS PUENTES
Por Jorge Corrales Quesada
Con triste intermitencia emanan noticias acerca de los puentes nacionales. No acerca de alguna inauguración o de una muy anhelada reparación, sino del descuido y abandono en que se encuentran muchas de nuestras estructuras. Incluso no hace mucho se informó -y lo comenté en un artículo de la serie de EL ESTADO INEFICIENTE- acerca del abandono en que el MOPT ha tenido los llamados puentes Bailey, tan costosos pero tirados en algún terreno, sin uso y dejando que se corroan.
Pero el acabose acerca del desorden lo expone un reciente informe de la Contraloría General de la República (CGR), mencionado en un comentario de La Nación del 27 de mayo titulado “Contraloría denuncia abandono de puentes: Reprende a CONAVI por falta de planificación.”
Dicho informe contempla cinco serios puntos, que muestran la negligencia y desidia con que el estado ha tratado el tema de nuestros puentes, acerca de los cuales nadie duda de que un buen estado es crítico para la eficiencia de cualquier sistema vial de un país. Hemos visto los ejemplos de cómo, cuándo a la carrera, posiblemente ante una emergencia, se tiene que reparar un puente. Ocasiona un enorme trastorno en las vías, dando lugar no sólo a un serio dolor de cabeza para quienes se ven afectados en su tránsito, sino también provocando un costo elevado en cuanto a tiempo, gasolina, duración de entregas y otros, además de derrames biliares.
Una conclusión del informe de la CGR es su determinación de que “el Consejo Nacional de Vialidad (CONAVI) es incapaz de dar mantenimiento a los 1.350 puentes que tiene la red vial nacional.” Esta declaratoria de incapacidad es muy grave, pues esta última institución, dependiente del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), tiene a su cargo cumplir con dicha función de cuidar nuestra infraestructura de puentes. Por lo tanto, si no cumple con la tarea, quiere decir que no hay entidad estatal a cargo del buen estado de la red pública de puentes, lo cual muestra la inutilidad del aparato estatal.
Una segunda resolución de la CGR señala que el CONAVI “carece de un plan de mantenimiento a mediano y largo plazo, que permita evitar el deterioro de las estructuras.” Lo cual quiere decir que los puentes están abandonados, en un plazo mediano o largo, a la buena de Dios, pues no existe un indispensable plan de conservación de las estructuras de los puentes en buen estado y, por lo tanto, terminan inutilizados.
En tercer lugar, señala la CGR, el CONAVI “y el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) no disponen de un programa de inversión para puentes.” Esto es, esas entidades no tienen ni idea de cuáles puentes deben de erigirse y mantenerse en el curso del tiempo, sino cuando, de pronto, salta la necesidad impostergable de hacerlos o de brindarles las labores de conservación y mantenimiento necesarias.
Como cuarto hallazgo, la CGR señala que el CONAVI, no cuenta “con un inventario de puentes para determinar en qué estado se encuentran.” Esto es, como no se sabe cuáles puentes hay o existen en el país, por falta de disponer del inventario correspondiente, no se puede saber el estado en que estos se encuentran. Por eso los burócratas se llevan cada sorpresa cuando un puente no puede servir para más.
Finalmente, en quinta instancia, la CGR expone que el CONAVI “sólo ejecutó el 19.6% del presupuesto destinado para puentes. El Plan Nacional de Desarrollo 2011-2014 separó $167 millones para ese rubro. Sin embargo, entre el 2011 y el 2013 se habían utilizado $31.7 millones.” Esto quiere decir que, no es por falta de plata que no se ha dado el mantenimiento, sino por la impericia administrativa y mal manejo y planificación en el uso de los recursos escasos de esa dependencia.
Dicho informe de la CGR también señala (creo que reitera, pues ya los habíamos visto en otros comentarios) los puentes cuyo estado es crítico y que vale la pena mencionarlos una vez más (nótese que todos los citados están en las rutas nacionales más importantes del país): Puente sobre el río Colorado (Rafael Iglesias) de la Interamericana norte; Puente sobre la quebrada El Fierro, Interamericana sur (me imagino que entre Cartago y Tres Ríos); Puente sobre el río Arenal, en el cruce a Río Frío- Puerto Viejo; Puente sobre el río Chirripó, carretera a Limón; Puente sobre el río Reventazón, también camino a Limón y el puente sobre el río Barranca, cerca de Puntarenas, en la interamericana norte. O sea, todas las principales vías del país tienen puentes en riesgo y ni siquiera existe un programa de inversión para arreglarlos.
La conducta gubernamental es bien explicada por don Rándall Murillo, quien es el director ejecutivo de la Cámara Costarricense de la Construcción: “Lo único que se está haciendo es ser reactivo; cuando algo falla, lo mandan a reparar y esa reparación puede tardar minutos, días o a veces años, como ‘la platina’”. No hay duda de que estamos en las manos de Dios, en cuanto al mantenimiento de nuestros puentes vitales.
Publicado en mis sitios en Facebook jorge corrales quesada y Jcorralesq Libertad el 24 de setiembre del 2015.
Por Jorge Corrales Quesada
Con triste intermitencia emanan noticias acerca de los puentes nacionales. No acerca de alguna inauguración o de una muy anhelada reparación, sino del descuido y abandono en que se encuentran muchas de nuestras estructuras. Incluso no hace mucho se informó -y lo comenté en un artículo de la serie de EL ESTADO INEFICIENTE- acerca del abandono en que el MOPT ha tenido los llamados puentes Bailey, tan costosos pero tirados en algún terreno, sin uso y dejando que se corroan.
Pero el acabose acerca del desorden lo expone un reciente informe de la Contraloría General de la República (CGR), mencionado en un comentario de La Nación del 27 de mayo titulado “Contraloría denuncia abandono de puentes: Reprende a CONAVI por falta de planificación.”
Dicho informe contempla cinco serios puntos, que muestran la negligencia y desidia con que el estado ha tratado el tema de nuestros puentes, acerca de los cuales nadie duda de que un buen estado es crítico para la eficiencia de cualquier sistema vial de un país. Hemos visto los ejemplos de cómo, cuándo a la carrera, posiblemente ante una emergencia, se tiene que reparar un puente. Ocasiona un enorme trastorno en las vías, dando lugar no sólo a un serio dolor de cabeza para quienes se ven afectados en su tránsito, sino también provocando un costo elevado en cuanto a tiempo, gasolina, duración de entregas y otros, además de derrames biliares.
Una conclusión del informe de la CGR es su determinación de que “el Consejo Nacional de Vialidad (CONAVI) es incapaz de dar mantenimiento a los 1.350 puentes que tiene la red vial nacional.” Esta declaratoria de incapacidad es muy grave, pues esta última institución, dependiente del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), tiene a su cargo cumplir con dicha función de cuidar nuestra infraestructura de puentes. Por lo tanto, si no cumple con la tarea, quiere decir que no hay entidad estatal a cargo del buen estado de la red pública de puentes, lo cual muestra la inutilidad del aparato estatal.
Una segunda resolución de la CGR señala que el CONAVI “carece de un plan de mantenimiento a mediano y largo plazo, que permita evitar el deterioro de las estructuras.” Lo cual quiere decir que los puentes están abandonados, en un plazo mediano o largo, a la buena de Dios, pues no existe un indispensable plan de conservación de las estructuras de los puentes en buen estado y, por lo tanto, terminan inutilizados.
En tercer lugar, señala la CGR, el CONAVI “y el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) no disponen de un programa de inversión para puentes.” Esto es, esas entidades no tienen ni idea de cuáles puentes deben de erigirse y mantenerse en el curso del tiempo, sino cuando, de pronto, salta la necesidad impostergable de hacerlos o de brindarles las labores de conservación y mantenimiento necesarias.
Como cuarto hallazgo, la CGR señala que el CONAVI, no cuenta “con un inventario de puentes para determinar en qué estado se encuentran.” Esto es, como no se sabe cuáles puentes hay o existen en el país, por falta de disponer del inventario correspondiente, no se puede saber el estado en que estos se encuentran. Por eso los burócratas se llevan cada sorpresa cuando un puente no puede servir para más.
Finalmente, en quinta instancia, la CGR expone que el CONAVI “sólo ejecutó el 19.6% del presupuesto destinado para puentes. El Plan Nacional de Desarrollo 2011-2014 separó $167 millones para ese rubro. Sin embargo, entre el 2011 y el 2013 se habían utilizado $31.7 millones.” Esto quiere decir que, no es por falta de plata que no se ha dado el mantenimiento, sino por la impericia administrativa y mal manejo y planificación en el uso de los recursos escasos de esa dependencia.
Dicho informe de la CGR también señala (creo que reitera, pues ya los habíamos visto en otros comentarios) los puentes cuyo estado es crítico y que vale la pena mencionarlos una vez más (nótese que todos los citados están en las rutas nacionales más importantes del país): Puente sobre el río Colorado (Rafael Iglesias) de la Interamericana norte; Puente sobre la quebrada El Fierro, Interamericana sur (me imagino que entre Cartago y Tres Ríos); Puente sobre el río Arenal, en el cruce a Río Frío- Puerto Viejo; Puente sobre el río Chirripó, carretera a Limón; Puente sobre el río Reventazón, también camino a Limón y el puente sobre el río Barranca, cerca de Puntarenas, en la interamericana norte. O sea, todas las principales vías del país tienen puentes en riesgo y ni siquiera existe un programa de inversión para arreglarlos.
La conducta gubernamental es bien explicada por don Rándall Murillo, quien es el director ejecutivo de la Cámara Costarricense de la Construcción: “Lo único que se está haciendo es ser reactivo; cuando algo falla, lo mandan a reparar y esa reparación puede tardar minutos, días o a veces años, como ‘la platina’”. No hay duda de que estamos en las manos de Dios, en cuanto al mantenimiento de nuestros puentes vitales.
Publicado en mis sitios en Facebook jorge corrales quesada y Jcorralesq Libertad el 24 de setiembre del 2015.